Seguro que Valery Karpin, ahora entrenador del Spartak de Moscú, nunca imaginaría que contaría con un refuerzo goleador desde la grada en su duelo ante el Saturn correspondiente a la primera división rusa. Pero así fue. Su equipo perdía por 1-0 cuando el árbitro señaló penalti a su favor. El ex jugador de la Real y el Celta, al que ayuda como segundo otro conocido del fútbol español como es Igor Ledhiakov, ordenó al brasileño Alex que lo tirara.
Cuando el sudamericano se disponía a disparar y el resto de jugadores esperaban al rechace, dos aficionados hicieron acto de aparición en el terreno de juego. Uno se dirigió directo al esférico y batió al sorprendido portero del Saturn, mientras el otro lo celebraba y se abrazaba a los no menos alucinados jugadores del Spartak.
Una vez que los hinchas fueron retirados del terreno de juego, el árbitro ordenó a Alex lanzar la pena máxima. El brasileño batió a la perfección al meta local, pero como el penalti estaba 'maldito', de inmediato mandó repetirlo por invasión del área por parte de los delanteros visitantes. En la repetición el portero adivinó el lanzamiento, aunque no pudo evitar que el balón acabara entrando en su meta.
Cuando el sudamericano se disponía a disparar y el resto de jugadores esperaban al rechace, dos aficionados hicieron acto de aparición en el terreno de juego. Uno se dirigió directo al esférico y batió al sorprendido portero del Saturn, mientras el otro lo celebraba y se abrazaba a los no menos alucinados jugadores del Spartak.
Una vez que los hinchas fueron retirados del terreno de juego, el árbitro ordenó a Alex lanzar la pena máxima. El brasileño batió a la perfección al meta local, pero como el penalti estaba 'maldito', de inmediato mandó repetirlo por invasión del área por parte de los delanteros visitantes. En la repetición el portero adivinó el lanzamiento, aunque no pudo evitar que el balón acabara entrando en su meta.
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