La Policía Nacional hará un profundo análisis de los sucesos ocurridos en El Molinón el pasado sábado, tanto durante el partido, como tras su celebración, en la zona del garaje y en otros lugares del exterior del campo.
El coordinador de seguridad ya dio orden de revisar las películas que quedan grabadas en las cámaras de la Unidad de Control Operativo, que controlan todas las zonas del campo desde 42 puntos distintos.
El pasado sábado se registraron incidentes en la fase final del partido en la grada del Fondo Joven, con una carga policial a los aficionados que se ubican en este sector. Según fuentes policiales, la decisión de intervenir fue de la propia policía, después de que se lanzara un bombo a la cabeza de un agente de las UIP, compañía de la Policía Nacional especializada para estos casos, que fue destinada en esta ocasión al partido Sporting-Córdoba. Esta acción pasó inadvertida para algunos aficionados que estaban en la zona, por lo que censuraron la intervención policial, que también impidió que un grupo de seguidores cambiara de grada avanzado el segundo tiempo.
Además de los tres aficionados identificados que figuran en los partes oficiales podrían sumarse algunos más en función de los hechos que analice la Policía en las imágenes del encuentro, además de haberse abierto otra investigación por los incidentes ocurridos en el garaje.
El ambiente estuvo encrespado desde antes del inicio del partido por una manifestación de protesta convocada por Ultra Boys contra la gestión del consejo de administración y la petición de dimisión, así como la salida del club del máximo accionista. Tras manifestarse ante la puerta de autoridades, en las gradas se reiteraron los gritos de protesta, que en algunos casos también fueron extensivos a los jugadores del equipo gijonés.
El ambiente tenso empezó a fomentarse en El Molinón en el transcurso del encuentro contra el Racing, disputado en el primer fin de semana de febrero. Con motivo de la visita del Elche se produjo la primera concentración convocada ante la puerta principal de El Molinón. Aunque se repitieron en otros encuentros, los resultados victoriosos de Alcorcón y Almería, sumados a los logrados en casa frente al Girona, Barcelona B y Castilla redujeron el número de manifestantes en los prolegómenos de cada encuentro, aunque no cesaron los gritos esporádicos en contra de José Fernández y del consejo de administración del club rojiblanco.
La derrota en Ponferrada culminó una postura de malestar y en el encuentro ante el Hércules se repitieron las movilizaciones, si bien después de que el Sporting perdiera en Las Palmas, lo que significaba quedar fuera de las opciones de 'play off', se fomentó la concentración celebrada el pasado sábado.
La Policía Nacional, para prevenir algún tipo de incidentes, decidió aplicar al partido un dispositivo especial, como si el encuentro fuera de alto riesgo.
El informe con las denuncias será tramitado a la Comisión Antiviolencia, que estudiará las sanciones que impondrá a los infractores, con multas que oscilarán entre 3.000 y 6.000 euros, más un periodo de inhabilitación para entrar en recintos deportivos. Si las imágenes detectan más casos, se añadirán en un anexo.
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