Calma en Vallecas

Con el recuerdo de Francisco Javier Romero Taboada en el ambiente que se respiraba en la fría noche madrileña, Rayo y Valencia se vieron las caras en la ida de dieciseisavos de Copa, con victoria para los visitantes (1-2). Alcácer y De Paul remontaron en la segunda mitad el gol de Alex Moreno y acercan al Valencia a octavos de final. Por fortuna, únicamente se enfrentaron dentro del terreno de juego y no hubo nada extraño en los aledaños del estadio entre las aficiones. Y eso que viajaron muchos seguidores chés

Con el pitido inicial los ultras del Rayo desplegaron un mural con su escudo y comenzaron a entonar sus cánticos e himnos con el habitual manteo de banderas. También una enorme pancarta que rezaba: «Que la tierra te sea leve, Jimmy». Atrás quedaron los incidentes y los asuntos extradeportivos relacionados con el ultra del Depor fallecido el domingo. La reyerta producida en el Manzanares fue el detonante para que la Comisión Antiviolencia decretara que tanto este partido, como el Hospitalet-Atlético y el Deportivo-Málaga fueran considerados de alto riesgo por la posible presencia de actos violentos, algo que no sucedió. Más de 300 efectivos, entre policías, sanitarios y vigilantes de seguridad, supervisaron el encuentro tanto dentro como en los alrededores del estadio.

Por la mañana, los Bukaneros habían ofrecido una rueda de prensa (con sus rostros cubiertos por capuchas y bufandas y sin posibilidad de preguntas) en la que expresaban todo su apoyo «hacia el deportivista asesinado y a toda su familia» y en la que desmintieron la participación de cualquiera de sus miembros en la pelea del domingo. Además, arremetieron contra la Delegación del Gobierno asegurando que «por su culpa están sufriendo una campaña de difamación ya que realizaron una actuación vergonzosa». La Jefatura Superior de la Policía de Madrid, que arrestó a 21 aficionados que participaron en la reyerta, difundió que dos de ellos pertenecían a los Bukaneros.