"El club ha tomado la decisión de dar de baja como peña oficial al Frente Atlético (...) y cesar cualquier relación con dicho grupo". Así lo anunció el Atlético de Madrid en un reciente comunicado. El asesinato de 'Jimmy' Romero Taboada, el ultra del Dépor que falleció a golpes en la batalla campal entre radicales gallegos y madrileños, significó que la directiva rojiblanca tomase medidas contra sus seguidores más violentos.
Sin embargo, Gil Marín no ha decidido acabar con todo el Frente. "Yo no soy quién para disolverlo", dijo el dueño del Atlético hace unos días. Efectivamente, en el mismo comunicado se explicó que "la disolución en términos legales del Frente Atlético como asociación privada o entidad con personalidad jurídica propia no es competencia del club y, por tanto, no puede ser ejecutada por nosotros". Por tanto, se ha procedido a una reconversión.
Prohibición de enseñar emblemas del Frente, expulsión de los violentos y cambio de denominación
En las oficinas del Calderón tenían claro que debían actuar después de los gravísimos acontecimientos del domingo. Sin embargo, ni Gil Marín ni el resto de los directivos querían acabar con el Frente. En el club tienen claro que es necesaria una grada de animación, y los mensajes desde la planta noble colchonera siempre han buscado distinguir entre aficionados violentos y no violentos. Además, las redes sociales se han inundado de mensajes de apoyo para los miembros del Frente no radicales. Por tanto, se ha buscado una transformación.
Después de los contactos que Gil Marín ha mantenido con los líderes del 'FA' en los últimos días, han quedado claras las nuevas directrices. Nacerá un nuevo grupo, que pasará a denominarse 'Atlético Fans Fondo Sur'. Este nuevo nombre no es definitivo al 100%, pero sí es el que tiene más opciones de ser elegido. Además, serán expulsados todos los implicados en la pelea del domingo y aquellos que cuenten con antecedentes penales violentos.
Por otro lado, el club ha pedido discreción a sus seguidores. Se quiere evitar cualquier cántico racista, xenófobo o que incite a la violencia. "Perseguiremos a cualquier otro colectivo, peña o grupúsculo que pudiera surgir en el futuro bajo cualquier otro nombre, que no condene radicalmente la violencia o que utilice el nombre del Atlético de Madrid o sus instalaciones para defender ideas políticas, racistas o xenófobas", afirmaba el comunicado. Por tanto, se pedirá a los aficionados del Fondo Sur que no muestren enseñas o impulsen cánticos en esta línea.
El nuevo grupo seguirá teniendo un cuarto para guardar su material, pero sin pintadas xenófobas
En cuanto a los símbolos, el Atlético quiere evitar cualquier referencia al anterior grupo ultra. "Pondremos todos los medios a nuestro alcance para impedir la exhibición en el interior del Estadio Vicente Calderón de pancartas u otros elementos distintivos del Frente Atletico", explicaba también el escrito publicado en la web oficial. Así se hará.
En su lugar, se permitirán banderas o pancartas del 'Atlético Fans Fondo Sur'. Serán bienvenidas todas las que se usen para animar al equipo y que no tengan mensajes que inciten a la violencia. Después de que 'AtresMedia' publicara un vídeo del cuarto en el que el Frente guardaba su material (en el que abundaba la simbología nazi), en el Calderón tienen claro que hay que evitar imágenes así.
Por tanto, la nueva agrupación tendrá un lugar para almacenar sus banderas y pancartas, siempre y cuando cumplan los principios exigidos por Gil Marín. En casi todos los clubes es habitual que los grupos más activos, que suelen desplegar material difícil de trasladar, dispongan de un lugar en el que dejar los objetos usados en su apoyan al equipo. El Atlético lo respetará, trasladándolo al primer anfiteatro.
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