Una potente batería de medidas se ha puesto en marcha para desalojar a los ultras del fútbol español. Y se promulgarán en breve. A partir del día 15 de diciembre, entrarán en vigor unas normas severas para los equipos: cierre parcial y total de estadios, pérdida de puntos y categoría para las entidades que apoyen a los radicales, listado de ultras oficial de toda España y, la novedad, tornos de reconocimiento facial y digital en los sectores calientes de los campos. En definitiva, a partir de hoy todos los clubes de la Liga tendrán que adoptar medidas similares a las que tomó el Atlético con el Frente Atlético, la expulsión.
La reunión del Consejo Superior de Deportes, la Liga y la Federación (con la ausencia de Villar) se saldó con normas drásticas y de efecto inmediato. Así lo dijo el presidente del Consejo Superior de Deportes: «El 15 de diciembre aprobaremos reformas que permitan cierres parciales de estadios, retirada de puntos de los equipos, descenso de categoría a los que colaboren directa o indidirectamente con los violentos. Exigiremos que en todos los partidos haya oficiales especializados, informadores que cubran la laguna jurídica que existe. La violencia verbal que hay en los estadios no se refleja en documentos y esto tiene que ser suministrada por los informadores. La Liga creará oficiales especializados en seguridad. Consideramos que es muy importante. La represión depende deque se conozcan hechos».
Hasta ahora los aficionados entraban en los estadios a través de entradas que un torno leía con el código de barras. Según explicó Javier Tebas, el presidente de la Liga, a partir de ahora habrá tornos de reconocimiento facial y digital en las zonas calientes de los campos, por donde se supone que entran los ultras.
Y Cardenal insistió en el plan: «Todos los equipos tienen que romper su relación con los ultras y el que no lo haga tendrá sufrirá pérdida de puntos o de categoría».
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