El Sevilla FC ha solicitado formalmente a LaLiga que denuncie ante el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) los gestos realizados por Sergio Ramos tras su celebración de un gol este jueves en el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey.
El club andaluz considera que la actitud de Sergio Ramos, que se llevó las manos a las orejas y desafió a parte de la grada con su mirada, es "constitutiva de infracción del Código Disciplinario de la RFEF". Posteriormente el zaguero del Real Madrid pidió perdón juntando las manos al resto del Sánchez Pizjuán.
"Al mismo tiempo el Sevilla quiere dejar claro que esta institución condena los insultos que recibió el jugador, los cuales no pueden ser en ningún caso justificados ni amparados, y reitera que los aficionados sevillistas deben erradicar los insultos tanto a clubes como a jugadores rivales, algo que solo deteriora la imagen del club y que puede acarrear graves sanciones", añade en su comunicado.
Además, el Sevilla quiso recordar en su nota -de cara al partido del domingo nuevamente ante el Real Madrid- su deseo de "transmitir a sus aficionados que disfruten este día del fútbol y del colorido único del Ramón Sanchez-Pizjuán, siempre desde el respeto y la tolerancia hacia su rival".
En este sentido, el club nervionense aseguró que recurrir al insulto o a acciones vejatorias hacia el rival supone "manchar los valores tradicionales del Sevilla y de este deporte en su conjunto, que tanto bien han hecho a la sociedad". "La tolerancia y el respeto entre los aficionados son parte inherente del fútbol, al igual que la animación, sin excluir una cosa de la otra", continúa el Sevilla.
En este sentido, el Sevilla FC transmitió su "inquebrantable compromiso contra la violencia y con el cumplimiento de las disposiciones normativas que regula las obligaciones de los clubes deportivos y SAD en materia de prevención y erradicación de la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte (...) además de recordar su adhesión a la campaña Afición+Respeto: Vive el fútbol, impulsada por la Liga de Fútbol Profesional la temporada pasada.
LaLiga, por su parte, ya denunció en la mañana de este jueves los insultos recibidos por el jugador del Real Madrid. "Estos cánticos aparecen recogidos como comportamientos prohibidos y por tanto sancionables, tanto en el Código de Disciplina Deportiva de la RFEF como en la Legislación", recordó el ente presidido por Javier Tebas.
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