Los hinchas de River pudieron entrar por primera vez en el estadio de Estudiantes desde que la Liga Argentina prohibiera la venta de entradas a aficionados visitantes. El esperado momento se vio empañado tras unos incidentes con la Policía, que tuvo que disparar pelotas de goma y lanzar gases lacrimógenos contra los seguidores del 'Millonario'.
Mientras Argentina y la CONMEBOL se deciden acerca de la entrada de público vistante en el doble 'Superclásico' de la final de la Copa Libertadores, la convivencia entre los hinchas no parece muy halagüeña.
River visitó el estadio de Estudiantes en lo que debía ser una gran fiesta del fútbol ya que, por primera vez en varios años, los aficionados visitantes iban a poder acceder ver un encuentro fuera de casa
Pero la realidad fue bien diferente y acabó con casi medio centenar de detenidos por parte de la policía. Según han publicado 'Clarín ' y 'Olé', los cuerpos de seguirdad pillaron a varios seguidores con entradas falsificadas.
La policía redujo a un simpatizante del 'Millonario' que intentó arrebatarle la porra uno de los oficiales y a partir de ahí se formó el tumulto. Los agentes, para tratar de reorganizar a la hinchada visitante dispararon pelotas de goma y soltaron varios gases lacrimógenos, según un comunicado de la Asociación para la Prevención de la Violencia en el Deporte.
Los aficionados de River se mostraron muy enfadados ante la respuesta de la policía ya que en su criterio excedieron los límites al golpear repetidamente a varios aficionados visitantes.
Mientras desde la Casa Rosada aseguran que el Gobierno está preparado para garantizar la seguridad del 'Superclásico', la realidad es que no han sido capaces de ni de asegurar un partido de Liga.
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