El calor no pudo empañar la fiesta

Las banderas multicolores y los hinchas enfundados en miles de camisetas de Argentina y de Brasil dominaron la escena en el estadio “José Pachencho Romero”, el escenario de la fiesta brasileña. Desde varias horas antes del cotejo decisivo, los aficionados venezolanos, brasileños y argentinos fueron poblando el estadio. Sombreros de todo tipo, con el predominio del amarillo y el azul, se menearon en las tribunas del remodelado estadio marabino, que luego fue testigo de la coronación celebrada por brasileños acompañados por muchos hinchas de Venezuela, de Ecuador, de Colombia y de México.Los organizadores repartieron varias pelotas de gran tamaño, que fueron recorriendo la tribuna principal, las gradas y los laterales. El calor superó los 35º en las tribunas. Los aficionados evitaron la deshidratación con cientos de litros de agua, mientras agitaban las banderas de los dos países finalistas y sonaban cientos de cornetas.Las medidas de seguridad fueron extremas esta vez, a tal punto que los periodistas debieron entrar por un acceso diferenciado, debido a que por el ingreso habitual iban a acceder al Palco de Honor autoridades políticas locales, de la FIFA -estuvo el presidente Joseph Blatter- y de la Conmebol.ChayannePero, para muchos, sobre todo para muchas, el principal foco de atención no se encontraba dentro del “Pachencho”, sino a unos 500 metros. Allí estaba previsto, para luego de la ceremonia de premiación, un recital de Chayanne.Un gran escenario se armó en la avenida Rafael Urdaneta. Miles de fanáticas estuvieron más interesadas en el puertorriqueño que en lo que hicieron Lionel Messi, Robinho y compañía. Y pudieron disfrutar del show gratis, ya que el alcalde de Maracaibo, Gian Carlo di Martin, dispuso que el final de fiesta de “la mejor sede de la Copa América”, según se encargan de dejar en claro los maracuchos, fuera a toda orquesta.La fiesta del fútbol sudamericano llegó a su final feliz no sólo para la selección de Brasil, sino para el país anfitrión, que dejará un legado con nueve estadios de primer nivel y la posibilidad en un futuro de ser organizador de un Mundial de categorías menores. (EFE-Télam-Especial)