La Unión de Fútbol de Rusia (UFR) ha condenado las agresiones contra los aficionados ingleses, ocurridas en la víspera del partido y también este mismo miércoles en distintas zonas de Moscú. El ambiente es negativo y las autoridades policiales extreman las medidas de seguridad para que no haya más violencia. Ya se palpaba un tufillo muy particular en torno al Rusia-Inglaterra de este miércoles, y lamentablemente se han confirmado los peores pronósticos. Hubo varios enfrentamientos en Moscú entre aficionados de ambas selecciones y entre los doce ingleses heridos hay uno que permanece en estado grave, con traumatismo de cráneo. En la noche de este pasado martes, cuatro hinchas ingleses fueron agredidos por unos desconocidos en un paso subterráneo cerca del hotel en donde se hospedaban, y también hubo otros violentos choques en otros puntos de la capital rusa. Cuatro hinchas británicos tuvieron que ser hospitalizados en el centro clínico Botkin de Moscú, mientras que los otros dos se negaron a permanecer internados porque no querían perderse el partido de este miércoles, donde los ‘pross’ podrían lograr la clasificación para la EURO 2008 si ganan a Rusia. El portavoz de la Unión de Fútbol de Rusia, Andrei Malosolov, dijo que se sentían “indignados por esas manifestaciones de agresión" contra los hinchas ingleses, en declaraciones efectuadas a la agencia Interfax. En tanto, la Policía de Moscú ha destinado nada menos que 5.000 agentes para tratar de garantizar el orden público en las inmediaciones y dentro del estadio Luzhniki, donde se disputará el partido desde las 17 (hora de España).
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