domingo, 24 de febrero de 2008

Hinchas expulsados del Comando Sur entraron a Matute y causaron temor

Momentos de tensión se vivió en la práctica aliancista en la mañana de ayer. La lucha por conseguir el sillón presidencial del club va tomando otro rumbo, sembrando inestabilidad y temor entre los jugadores del primer equipo blanquiazul. Minutos antes del inicio de los entrenamientos, un grupo de la barristas expulsados del Comando Sur por actos de violencia y robos, se metió hasta la cancha principal del estadio de Matute en busca de Carlos Franco, pero se encontraron con los jugadores. No se sabe con qué intención querían hablar con el presidente interino. “Con ustedes no es muchachos”, dijo el cabecilla del grupo, formado por gente de la carretera Central, San Juan de Lurigancho y El Agustino. Los entrenamientos se paralizaron y tuvo que ser Carlos Carpio, gerente deportivo, quien salió a hablar con ellos para calmar los ánimos. La intención de este grupo era conversar con Carlos Franco, tal como sucedió en la romería que hace el club a sus mártires en el cementerio El Ángel. En aquel momento reclamaba que había injusticia en la entrega de entradas, pero esta vez el temor se apoderó de los jugadores y tuvo que llegar la policía para asegurar que no pasara nada. El Comando Sur también se hizo presente en la cancha auxiliar para evitar cualquier tipo de problema y confirmó que esta tarde estará presente en el estadio para alentar a sus jugadores y darles el respaldo en este nuevo campeonato.

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