viernes, 29 de febrero de 2008

Las peñas critican la pasividad de los Mossos en la emboscada de los ultras

Indignación. La palabra resume el sentir del valencianismo ante la actitud violenta de un sector de exaltados seguidores del Barcelona antes y al finalizar el partido correspondiente a la ida de las semifinales de la Copa del Rey.Favorecidos por la pasividad de los Mossos d'Esquadra, que no ofrecieron protección alguna a los aficionados del Valencia, los ultras culés increparon, amedrentaron y agredieron a los seguidores blanquinegros, según testigos presenciales, en algunos casos utilizando bates de béisbol, palos y piedras.Los incidentes comenzaron antes del partido, pero los de mayor gravedad se produjeron al concluir el mismo, cuando algo más de medio centenar de valencianistas se dirigían tranquilamente a buscar sus respectivos autobuses para regresar a Valencia. "Estábamos colocados en gradas contrarias a la de la mayoría de la afición desplazada", relata uno de los seguidores que vivió la emboscada que al acabar el encuentro prepararon unos ultras culés.No obstante, este seguidor también desvela que durante el partido comunicaron la situación a un empleado del Valencia, presente en la zona, para que contactara con los dirigentes y con la Policía. "Pero no apareció nadie", lo que le hace pensar que nadie se interesó por su situación.Quienes vivieron la pesadilla explican que de la agresión verbal se pasó a la física, produciéndose una estampida, con momentos de pánico, descontrol, caídas, contusiones y golpes. Aparte de las humillaciones y vejaciones dialécticas, a algunos les despojaron de sus banderas y bufandas -incluso a personas de edad-, y las quemaron. En el momento más crítico, miembros de Yomus se enfrentaron a los Boixos para defender a los seguidores.El Valencia emitió una nota de cinco líneas lamentando los incidentes que se produjeron "por una evidente falta de previsión y escasas medidas de seguridad en determinados momentos", mientras que la Agrupación de Peñas del Valencia denunció abiertamente la falta de protección policial para los peñistas, y en el texto destaca su sorpresa por cómo se puede dejar a una afición sin protección alguna, cuando se había informado puntualmente y a diario a las autoridades competentes y a la Policía Nacional del número exacto de personas que iban a desplazar a la ciudad condal, los medios que iban a utilizar, los horarios de salida y llegada de trenes y autobuses.Del mismo modo, en la denuncia de las peñas, tras desvelar la ausencia de Policía desde que los aficionados llegaron a la Estación de Sans y durante su estancia, recuerdan al presidente del equipo barcelonés, Joan Laporta, que su club tiene hinchas "exaltados y peligrosos", citando a los Boixos Nois, y le recuerdan que esos exaltados no están erradicados en el Barça. "El odio que existe contra el Valencia es todo un hecho", aseguran.

No hay comentarios:

Publicar un comentario