sábado, 22 de marzo de 2008

La barra brava de Boca Juniors vivió una jornada "extrema" en Macul

Juan Ignacio y Reinaldo están sentados sobre el cemento de la tribuna Magallanes del Estadio Monumental y no dan crédito a lo que ven. Sobre el verde césped del recinto de Macul el club de sus amores cae por 2-0 ante Colo Colo, en un duelo por Copa Libertadores.
El magro resultado pone fin de una manera amarga a una travesía que se inició 25 horas antes en la ciudad de La Plata, donde tomaron uno de los buses que los trasladó junto a un centenar de hinchas hacia nuestro país.
Ambos son amigos desde la infancia y comparten la pasión por el elenco xeneise algo que los hizo recorrer cientos de kilómetros para ver un nuevo compromiso del cuadro más popular de Argentina.
"Es la primera vez que vengo y me esperaba otra cosa, más fiesta en las tribunas. Esto demuestra que el hincha chileno es más frío que el argentino", comenta Reinaldo en tono desafiante.
De paso aclara que la llegada al estadio no estuvo exenta de problemas, ya que acusaron a Carabineros de retenerlos por más de cuatro horas en la aduana.
"La policía nos retuvo por más de cuatro horas y llegamos sobre la hora al partido. Además, hubo mucha desorganización en la venta de entradas. Algunos hinchas que llegaron el día anterior a Santiago sólo pudieron comprar el boleto de entrada en el hotel donde se alojó Boca ya que la información que dio Colo Colo fue muy mala", comentaron.
A poco de iniciarse el compromiso, los trapos y los globos de color azul y oro daban un colorido especial al recinto, que a esa altura ya estaba inundado de colores blanco y negro. Luego, los cánticos que uno semana a semana escucha a través de la transmisión televisiva de Fox Sports comenzaron a inundar el codo sur del recinto, pero éstos se fueron apagando paulatinamente a medida que el cuadro de Claudio Borghi plasmaba su superioridad en goles dentro del terreno de juego.
"En la primera llegada que tuvo Colo Colo anotaron y luego se metieron atrás buscando el contragolpe y les salió bien ya que luego nos mataron con otro tanto donde el delantero estaba solo en el área. Pese a todo Boca dominó el partido, pero se fue con las manos vacías", comentó Juan Ignacio.
En el complemento gran parte de la barra visitante intercambió frases e insultos de hueso calibre con los hinchas albos apostados en los codos Caupolicán y Galvarino.
Muchos "bosteros" se reían de la bandera gigante que mostró la Garra Blanca al inicio del partido, la que reza "Campeón hay uno solo". La respuesta visitante fue lógica ya que se preguntaban si el cuadro albo es el único campeón que quedará para el resto, como Boca, que a lo largo de su historia ha ganado 17 títulos internacionales.
Ya en el complemento los hinchas en su mayoría vistiendo la camiseta de Juan Román Riquelme tenían las esperanzas en que el mediocampista sacara de su sombrero de mago un toque letal que sentenciara la suerte colocolina.
"Para nosotros Román es lo máximo. Es el nuevo Maradona. Gracias a su talento Boca en los últimos años lo ha ganado todo. No sabe lo que se perdió Pellegrini en España", señala irónicamente Juan Ignacio.
Se acabó el partido y Juan Ignacio y Reinaldo esperan pacientemente el desalojo de los hinchas albos para subir al bus que los llevará de regreso a La Plata. Los minutos se les hacen eternos ya que reciben todo tipo de bromas de los hinchas nacionales que festinan con la victoria sobre el actual campeón de América.
Sin embargo, lanzan al unísono un desafío que los hinchas albos deberán tomar en cuenta la próxima semana en Buenos Aires, cuando Colo Colo viaje a disputar el duelo de revanchas.
"Colo Colo tiene que ir la semana próxima y los vamos a esperar allá. Boca en la Bombonera demuestra lo grande que es", señalaron antes de abordar el bus.

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