Hinchas violentos alemanes protagonizaron la noche pasada incidentes en varias ciudades del este del país, que en algunos casos mantuvieron en jaque a la policía durante horas y enturbiaron el buen balance general tras la derrota de Alemania.En Magdeburgo, grupos de alborotadores marcharon por la ciudad, incendiaron contenedores de basura y lanzaron botellazos y otros objetos contra los antidisturbios.Ocho policías resultaron heridos y numerosos automóviles ahí aparcados sufrieron daños, mientras una turba de hasta 500 hinchas violentos se lanzaban una y otra vez contra los antidisturbios, informaron hoy fuentes policías.En la ciudad sajona de Bautzen, otras 400 personas bloquearon durante horas una carretera nacional y libraron una batalla campal contra la policía.
Según parece, los alborotadores habían acordado la cita en ese punto antes del partido y, tras la derrota, se concentraron ahí dispuestos a emprenderla contra los antidisturbios y lo que les saliera al paso.Asimismo se registraron disturbios en Schwerin, en el noreste del país, al concentrarse en su casco urbano unos 300 alborotadores.
La policía de Sajonia y otros estados del este del país había reforzado el contingente, tras la experiencia de la semifinal contra Turquía, en que a la victoria de Alemania siguieron varios ataques contra locales turcos.Los disturbios protagonizados por esta hinchada violenta empañó el buen balance de la noche en el resto del país y especialmente en Berlín, donde más de medio millón de personas siguieron el partido desde la milla del aficionado.La gran mayoría tomó con deportividad la derrota e incluso hubo aplausos para el fútbol español.
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