Marea rayista

Zamora se despertó ayer con los cánticos de la afición del Rayo Vallecano. Los más de 30 autobuses de Madrid llegaron a los aparcamientos del Ruta de la Plata, donde quedaron estacionados, mucho antes de las 12.00 horas y desde primera hora de la mañana los más de 2.500 hinchas madrileños tomaron las calles de la ciudad. Allí por donde pasaban andando se hacían notar. Desde los más jóvenes hasta los más mayores se dejaban la voz en cada uno de los rincones de la ciudad. Había llegado a Zamora la hinchada rayista y pronto se quiso hacer notar.A su paso por las distintas calles de la ciudad, los seguidores del equipo de Pepe Mel iban levantando de sus camas a los zamoranos menos madrugadores. Muchos curiosos se asomaban por las ventanas de sus casas para darles la bienvenida y otros optaban por hacer sonar los cláxones de sus coches en señal de recibimiento.

Y la afición del Rayo Vallecano se lo agradecía con más aplausos y cánticos.Ataviados con bufandas, camisetas de su equipo, sombreros y demás indumentaria, los aficionados madrileños empezaban a poner la nota de color a una jornada que había comenzado con un tiempo desapacible. Nadie se esperaba ayer la intermitente lluvia y el fuerte viento que soplaría, sobre todo a las afueras de la ciudad. De hecho, muchos de los sombreros que llevaban puestos los hinchas franjirrojos cuando cruzaban el Puente de Piedra fueron a parar al río Duero a causa de las continuas ráfagas de aire. El Puente de Piedra se quedó pequeño para la hinchada de Vallecas.

Los coches que circulaban por este escenario lo tenían que hacer con más precaución de la habitual para no atropellar a nadie. Un seguidor del Rayo Vallecano se atrevió a decir: 'Si viniera aquí Gallardón, seguro que tiraba este puente y lo ampliaría'. Ya lo adelantó Tomé el pasado sábado tras el entrenamiento. La afición del equipo madrileño es «una afición fiel, leal, siempre sigue a su equipo y se hace escuchar». Y ayer lo demostró. Alrededor de las 13.00 horas, los más de 2.500 hinchas madrileños invadieron la calle de Los Herreros y la Plaza Mayor. Los más agradecidos, los dueños de los bares y restaurantes de la zona ya que ayer hicieron un gran negocio.'¿Somos de Vallecas y vamos a ganar!', '¿Que vote Vallecas!', '¿Aquí estamos, tus hinchas no fallamos!' o '¿El Rayo es de Primera!' fueron sólo algunos de los cánticos que entonó la hinchada del Rayo, que no se conforma con que su equipo ascienda a Segunda. Para los seguidores franjirrojos su equipo es de Primera.

No fue hasta la hora de la comida cuando se empezaban a dejar ver los aficionados del Zamora CF, que terminaron compartiendo conversaciones con los madrileños. Si los rojiblancos entonaban el '¿Alé ese Zamora, alé, alé!', los rayistas contestaban con '¿Mucho Rayo, oé!'. Pero el clima que se vivía en la ciudad entre ambas aficiones era inmejorable. La plaza de La Marina fue el lugar elegido por la afición rayista para comenzar, a las 17.00 horas, su camino hacia el Ruta de la Plata. Los seguidores rojiblancos también optaron por iniciar su andadura hacia el estadio junto a los primeros desde ese lugar, y de la boca de algún madrileño, después de hacer amigos en la capital, salió la frase de '¿Si lo importante no es ganar, sino disfrutar!'. Y eso es lo que pretendieron todos en el Ruta.