Ramón Jessurum, presidente de la rama profesional del fútbol colombiano (Dimayor) planteó ayer la necesidad de la aprobación en el Congreso de la República, de una ley que le entregue a la Policía he-rramientas para detener la violencia entre algunos hinchas del fútbol.
El dirigente deportivo agregó que no se puede descartar ninguna opción, por drástica que sea, con el fin de controlar los actos de barbarie que vienen ocurriendo como telón de fondo del fútbol, por cuenta de algunos integrantes de las llamadas “barras bravas”.
De otro lado, Jeisson Felipe León y David Ricardo Clavijo, sindicados del asesinato del hincha del Cali, David Pérez, fueron recluidos en la cárcel Modelo de Bogotá. Los hinchas de Santa Fe son sindicados de ser coautores de asesinato con sevicia a menor de edad. De ser hallados culpables podrían pagar mínimo 50 años de prisión.
Ayer, el alcalde de Bogotá, Samuel Moreno, descartó la prohibición del uso de camisetas alusivas a equipos profesionales de fútbol en las calles de la capital pero evidenció la necesidad de una discusión nacional a propósito de la violencia en los estadios.
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