En la tarde de ayer, 117 hinchas del Club Deportivo Guaymallén quedaron detenidos e imputados por el secuestro de dos micros del grupo 2. Los padres de los jóvenes realizaron un piquete durante la mañana de ayer, frente a la comisaría Novena, para pedir su liberación.
Según el relato de los choferes, los jóvenes subieron a los colectivos a la altura del carril Nacional, y tras amenazar con armas blancas a los conductores, los obligaron a que los trasladaran hasta el estadio, donde su equipo jugaba un partido por el campeonato argentino.
Otra es la versión de los familiares de las personas detenidas. Ellos afirman que los colectivos fueron alquilados para trasladarlos al club, y que no se trató de un secuestro.
“A los chicos les están haciendo una causa, les va a quedar un prontuario por algo que no existe. Hay padres testigos que acompañaron a sus hijos para que tomaran el colectivo, previo pago de su pasaje de $3 cada uno. Antes de subir, los pasajeros fueron requisados por la Policía”, dijo un padre.
Los familiares explicaron que los jóvenes habrían contratado los colectivos, pero, aparentemente, de esto no estaba al tanto la empresa, por lo que se especula se habría hecho esto con algún chofer que inventó la historia del secuestro. Además, durante el piquete, varias personas allegadas a los detenidos, denunciaron que éstos sufrieron maltrato policial.
Según el relato de los choferes, los jóvenes subieron a los colectivos a la altura del carril Nacional, y tras amenazar con armas blancas a los conductores, los obligaron a que los trasladaran hasta el estadio, donde su equipo jugaba un partido por el campeonato argentino.
Otra es la versión de los familiares de las personas detenidas. Ellos afirman que los colectivos fueron alquilados para trasladarlos al club, y que no se trató de un secuestro.
“A los chicos les están haciendo una causa, les va a quedar un prontuario por algo que no existe. Hay padres testigos que acompañaron a sus hijos para que tomaran el colectivo, previo pago de su pasaje de $3 cada uno. Antes de subir, los pasajeros fueron requisados por la Policía”, dijo un padre.
Los familiares explicaron que los jóvenes habrían contratado los colectivos, pero, aparentemente, de esto no estaba al tanto la empresa, por lo que se especula se habría hecho esto con algún chofer que inventó la historia del secuestro. Además, durante el piquete, varias personas allegadas a los detenidos, denunciaron que éstos sufrieron maltrato policial.
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