Los seguidores béticos, repartidos entre las gradas alta y baja del Gol Sur del Sánchez-Pizjuán.

Después de que el partido fuera declarado de alto riesgo por la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte del Consejo Superior de Deportes, ayer se produjo la clásica reunión de seguridad previa a cada derbi sevillano en la que los representantes de ambos clubes ultiman los planes a seguir junto a las autoridades. Además de las habituales medidas de seguridad para que no haya incidentes, la gran novedad será la ubicación de los seguidores béticos, repartidos entre las gradas alta y baja del Gol Sur del Sánchez-Pizjuán.
Con representantes de ambos clubes se reunieron en la comisaría de Blas Infante el subdelegado del Gobierno, Faustino Valdés, y los jefes de los distintos cuerpos policiales, Cruz Roja, Bomberos y Protección Civil. El buen ambiente entre las entidades hizo más fácil el entendimiento y se seguirá un protoclo similar al de anteriores derbis dado el éxito del mismo.
La novedad estriba, pues, en la ubicación del sector exclusivo para aficionados béticos para este partido, pues en este caso los 850 asientos destinados a los hinchas verdiblancos estarán repartidos entre la grada alta y la grada baja de Gol Sur, en la esquina habitual (junto a la grada de Fondo). Además, también habilitará mañana una puerta más, la número nueve, para el acceso de los seguidores heliopolitanos, de forma que su entrada sea más fluida y ordenada. Con esta medida el Sevilla tiene además la ventaja de reubicar a menos socios y así causar menos molestias a sus abonados. Éstos serán recolocados en los bancos de pista de Preferencia. Ayer seguía registrándose un buen ritmo de venta de entradas en las taquillas del estadio nervionense, que estarán abiertas hoy y mañana.