Multa histórica

La Comisión Nacional contra la Violencia reunida ayer en el Consejo Superior de Deportes ha propuesto la sanción más dura de la historia para seguidores de Osasuna. Ha solicitado que cada uno de los 55 miembros de Indar Gorri que se desplazaron el domingo a Santander sea castigado con una multa de 9.000 euros y la prohibición de 2 años para entrar en un recinto deportivo.
Antiviolencia explica en una nota que al acceder a El Sardinero estos "integrantes del grupo Indar Gorri insultaron gravemente a los aficionados locales y corearon consignas de apoyo a ETA". Al finalizar el encuentro y mientras custodiaban el autobús que los trasladaba, "los funcionaron policiales observaron cómo se lanzaron diversos objetos contundentes a la vía pública y se provocaron desperfectos en diversos vehículos", añade la nota del Ministerio del Interior.
Asimismo, hay tres propuestas individuales de sanción de ese partido. Una multa es de 4.000 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos durante doce meses "a un aficionado que alteraba el orden público intentando agredir a los aficionados allí presentes y, posteriormente, cuando se procedía a su identificación, se escudó entre los seguidores y les arengó en contra de la acción policial". Igual sanción se impondría a un aficionado "que vejó e insultó gravemente a dos seguidores del equipo local". El último seguidor sería multado con 3.001 euros y prohibición de acceso a los recintos deportivos durante doce meses, ya que "se resistió a la actuación de los funcionarios cuando procedían a su identificación".
Fueron expulsados
Los radicales de Osasuna se situaron en una de las esquinas de El Sardinero (en el otro rincón estaba el resto de aficionados rojillos) y fueron expulsados en el minuto 66 de partido, según confirmaron a Osasuna los responsables policiales de seguridad. En el viaje en autobús de vuelta a Pamplona, fueron escoltados por efectivos de la Guardia Civil para evitar más incidentes.

Las propuestas de sanción, que juntas superan los 500.000 euros, han llegado a la Delegación del Gobierno en Navarra. Se tiene constancia desde el club rojillo que la mayoría de aficionados que son multados por las propuestas de Antiviolencia terminan pagando las cantidades económicas. Además, en ese caso de sentencia firme, se les retira el carné de socio de Osasuna, tal y como propone el organismo del Ministerio del Interior.
Ya protestaron esta Liga
Los miembros de Indar Gorri, ubicados en la zona de Graderío Sur, ya protestaron en el encuentro de noviembre en el encuentro contra el Atlético de Madrid. Permanecieron todo el partido en silencio y sólo animaron cuando el árbitro pitó el final. "Animar a Osasuna no es delito", quisieron expresar entonces ante las multas, "cargas policiales" y "abusos de autoridad" que estaban sufriendo algunos seguidores.