La violencia enmascara de nuevo el fútbol, esta vez en un partido entre el Benidorm y el Lleida, pertenecientes al grupo III de Segunda B. A falta de pocos minutos para el final del encuentro, un acto vandálico ocasionado por un aficionado ha motivado que el árbitro declarase la suspensión definitiva del partido que estaban disputando en el Estadio benidormí de Foietes.
Cuando el marcador se encontraba 2-1 a favor de los locales, un aficionado exaltado ha dedidido lanzar un objeto contundente al campo y éste ha impactado contra el linier. Este hecho se producía en el minuto 83 y ha supuesto la fulminante suspensión del encuentro pese a que ambos equipos querían reanudar el juego.
Al parecer el hincha, que se encontraba solo y no pertenecía a ninguna peña de aficionados del Benidorm, habría lanzado una piedra contra el linier ya en el minuto 60 y el árbitro ya habría avisado al aficionado de las consecuencias que podría traer otra acción antideportiva. Sin embargo la situación se ha repetido minutos más tarde y ha sido necesaria la intervención de la Policía Local, que ha procedido a identificar y detener al agresor.
Por su parte, el linier ha recibido dos impactos de piedra, uno en la pierna y otro en la espalda, aunque no han sido graves y se encuentra en perfectas condiciones según fuentes presenciales.
Con todo, el club benidormí quedará a la espera de que el Comité de Competición se pronuncie, a lo largo de esta semana, sobre las posibles consecuencias de esta acción ocurrida en Foietes y también sobre la posible reanudación o no del partido suspendido.
Desde el club, su presidente, Jaume Doménech, ha expresado su “más enérgica condena a cualquier tipo de acto vandálico, violento o antideportivo que se lleve a cabo en cualquier terreno de juego y en cualquier competición deportiva. Actos reprobables como este van totalmente en contra de la política de no-violencia que sigue el club y que cumple la gran mayoría de la afición que siempre ha demostrado un comportamiento respetuoso".
El mandatario de la entidad blanquiazul ha aseverado que "es lamentable que una acción violenta de un exaltado ponga en entredicho la imagen de toda una afición y del club. En el Benidorm no nos cansaremos de repetir que nuestra meta y razón de ser están basadas en el fomento de la deportividad y de los valores humanos y cívicos que le son inherentes al deporte, por ello condenaremos cualquier tipo de acción agresiva e irrespetuosa como esta, una y mil veces”.
Cuando el marcador se encontraba 2-1 a favor de los locales, un aficionado exaltado ha dedidido lanzar un objeto contundente al campo y éste ha impactado contra el linier. Este hecho se producía en el minuto 83 y ha supuesto la fulminante suspensión del encuentro pese a que ambos equipos querían reanudar el juego.
Al parecer el hincha, que se encontraba solo y no pertenecía a ninguna peña de aficionados del Benidorm, habría lanzado una piedra contra el linier ya en el minuto 60 y el árbitro ya habría avisado al aficionado de las consecuencias que podría traer otra acción antideportiva. Sin embargo la situación se ha repetido minutos más tarde y ha sido necesaria la intervención de la Policía Local, que ha procedido a identificar y detener al agresor.
Por su parte, el linier ha recibido dos impactos de piedra, uno en la pierna y otro en la espalda, aunque no han sido graves y se encuentra en perfectas condiciones según fuentes presenciales.
Con todo, el club benidormí quedará a la espera de que el Comité de Competición se pronuncie, a lo largo de esta semana, sobre las posibles consecuencias de esta acción ocurrida en Foietes y también sobre la posible reanudación o no del partido suspendido.
Desde el club, su presidente, Jaume Doménech, ha expresado su “más enérgica condena a cualquier tipo de acto vandálico, violento o antideportivo que se lleve a cabo en cualquier terreno de juego y en cualquier competición deportiva. Actos reprobables como este van totalmente en contra de la política de no-violencia que sigue el club y que cumple la gran mayoría de la afición que siempre ha demostrado un comportamiento respetuoso".
El mandatario de la entidad blanquiazul ha aseverado que "es lamentable que una acción violenta de un exaltado ponga en entredicho la imagen de toda una afición y del club. En el Benidorm no nos cansaremos de repetir que nuestra meta y razón de ser están basadas en el fomento de la deportividad y de los valores humanos y cívicos que le son inherentes al deporte, por ello condenaremos cualquier tipo de acción agresiva e irrespetuosa como esta, una y mil veces”.
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