El Inter sufrió una cacerolada nocturna en su hotel de concentración

El partido del Barça contra el Inter de Milán empezó a disputarse en la noche de este martes cuando diversos aficionados azulgrana iniciaron la táctica de acoso y derribo moral a los italianos mediante el preludio de la presión que se espera para la noche de este miércoles en el Camp Nou.
Alrededor de medio centenar de aficionados, según fuentes policiales, se reunieron a las puertas del Hotel Rey Juan Carlos I de Barcelona para provocar a los 'neroazzurri' mediante gritos y cánticos a favor del Barça y en contra de los italianos.
Desde las doce de la noche hasta poco antes de la una de la madrugada los aficionados montaron su propia fiesta con el objetivo de desafiar al conjunto de Mourinho y preparar la antesala del gran partido europeo de la temporada.
A pesar de la presión y de las ganas propias de la remontada, no hubo que lamentar ningún incidente aunque sonó, eso sí, algún que otro petardo. Pero la realidad es que la cacerolada fue bastante efímera y todo volvió a la normalidad en los aledaños al hotel cuando los efectivos policiales allí desplazados invitaron a los aficionados a abandonar la zona y estos obedecieron de forma pacífica.