La marea granate en el Carlos Tartiere será un poco inferior a la que se dio cita en el Estadio de Mendizorroza hace dos semanas, pero igual de representativa. La Federación de Peñas del Pontevedra (FPP) cerró ayer el plazo de inscripción con más de 700 aficionados que llenarán 15 autobuses, que se verán reforzados por uno de Furya Granate con 35 personas y otro con 32 residentes del Asilo de ancianos, que también apoyaron al equipo contra el Alavés.
Pero a estos 800 hinchas hay que añadirle alrededor de otros 600, que compraron las entradas en las oficinas del Pontevedra al margen de la FPP, y que se desplazarán en sus vehículos particulares. Y nada sería de extrañar que incluso se sumaran nuevos aficionados a última hora, que tratarían de comprar una localidad en el propio Carlos Tartiere. La relativa cercanía de la localidad asturiana se presta a tentativas de este estilo.
La caravana de autobuses estará aparcada en la calle Alexandre Bóveda, delante del Instituto Xunqueira-1, en el lateral del recinto ferial. La expedición partirá mañana desde ese punto a las 7.30 horas con las maletas cargadas de ilusiones. Los organizadores dividirán los 17 autocares en cinco grupos. El primero de ellos realizará la perceptiva parada de 45 minutos en Vilalba, dos horas después de iniciar la marcha.
Poco después se detendrá el segundo en Guitiriz. Los aficionados de los restantes buses se bajarán respectivamente en Mondoñedo, San Cosme de Barreiro y Ribadeo.
Está previsto que lleguen a Asturias pasadas la dos de la tarde. Seis de los autocares se dirigirán a Avilés para comer y los restantes lo harán en Gijón. La FPP evitó el contacto con Oviedo durante el almuerzo para evitar posibles enfrentamientos entre las aficiones.
La entrada en la capital asturiana tendrá lugar a las 17.15 horas. La policía local de Oviedo estará esperando a la caravana de autocares para escoltarlos hasta el Campus Universitario del Cristo, en donde quedarán custodiados por seguridad privada y las fuerzas del orden.
Pero a estos 800 hinchas hay que añadirle alrededor de otros 600, que compraron las entradas en las oficinas del Pontevedra al margen de la FPP, y que se desplazarán en sus vehículos particulares. Y nada sería de extrañar que incluso se sumaran nuevos aficionados a última hora, que tratarían de comprar una localidad en el propio Carlos Tartiere. La relativa cercanía de la localidad asturiana se presta a tentativas de este estilo.
La caravana de autobuses estará aparcada en la calle Alexandre Bóveda, delante del Instituto Xunqueira-1, en el lateral del recinto ferial. La expedición partirá mañana desde ese punto a las 7.30 horas con las maletas cargadas de ilusiones. Los organizadores dividirán los 17 autocares en cinco grupos. El primero de ellos realizará la perceptiva parada de 45 minutos en Vilalba, dos horas después de iniciar la marcha.
Poco después se detendrá el segundo en Guitiriz. Los aficionados de los restantes buses se bajarán respectivamente en Mondoñedo, San Cosme de Barreiro y Ribadeo.
Está previsto que lleguen a Asturias pasadas la dos de la tarde. Seis de los autocares se dirigirán a Avilés para comer y los restantes lo harán en Gijón. La FPP evitó el contacto con Oviedo durante el almuerzo para evitar posibles enfrentamientos entre las aficiones.
La entrada en la capital asturiana tendrá lugar a las 17.15 horas. La policía local de Oviedo estará esperando a la caravana de autocares para escoltarlos hasta el Campus Universitario del Cristo, en donde quedarán custodiados por seguridad privada y las fuerzas del orden.
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