La nota negativa del duelo de rivalidad regional estuvo en los incidentes que se produjeron antes del encuentro. Hubo altercados entre aficiones. El principal tuvo lugar en el Carrefour, en el que se produjo un conato de agresión entre seguidores de ambos equipos. A consecuencia del incidente, fueron detenidos dos miembros de las Brigadas Charras y cuatro de la peña blanquivioleta Garrafoni. El motivo del arresto no fue la pelea en sí, sino la resistencia posterior a la autoridad. La Policía incautó en estos incidentes una navaja y dos bengalas. Entre los detenidos, dos menores. La Policía Nacional realizó las diligencias necesarias y puso en libertad a los seis detenidos. En el exterior del estadio, los cuerpos de seguridad también tuvieron que aplacar los ánimos entre ambas aficiones. Además, a otros cinco aficionados se les impidió el acceso al estadio José Zorrilla. Estas cinco personas se encontraban ya dentro de la instalación, pero se les obligó a abandonar el estadio para evitar males mayores.
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