Varios aficionados de fútbol resultaron heridos el sábado en la capital rusa después de enfrentarse a tropas del Ministerio del Interior tras una manifestación en memoria de un aficionado del Spartak de Moscú asesinado hace una semana.
Un número de transeúntes, quienes parecían ser miembros de minorías éticas del Cáucaso, también resultaron heridos tras haber sido atacados por los seguidores, dijo un testigo de Reuters.
Miles de jóvenes se reunieron en una manifestación realizada en la Plaza Manezh, cerca del Kremlin, en memoria de Yegor Sviridov, de 28 años, quien recibió un disparo y murió durante una pelea que tuvo lugar el domingo por la noche en el noroeste de Moscú.
Varios sospechosos, cuya procedencia sería del Cáucaso, fueron detenidos con motivo del asesinato.
Los manifestantes entonaron el sábado cánticos nacionalistas como "Moscú es una ciudad rusa", mientras se enfrentaban con tropas equipadas con armaduras y porras.
Las protestas políticas de pequeña escala son relativamente comunes en la capital rusa, pero una reunión de este tipo tan cerca de la casa de gobierno es poco frecuente. No hubo comentarios por parte de las autoridades policiales.
Más de 1.000 seguidores del Spartak de Moscú se reunieron más temprano el sábado en la parada de autobús en la que Sviridov fue asesinado.
Allí dejaron velas y bufandas con la frase "Spartak Ultras Moscú" -nombre del grupo principal de seguidores del club-, en un monumento conmemorativo que se montó en dicho lugar.
Algunos medios rusos informaron de que Sviridov era miembro de los Spartak Ultras, grupo vinculado con actos de violencia en el pasado.
Un número de transeúntes, quienes parecían ser miembros de minorías éticas del Cáucaso, también resultaron heridos tras haber sido atacados por los seguidores, dijo un testigo de Reuters.
Miles de jóvenes se reunieron en una manifestación realizada en la Plaza Manezh, cerca del Kremlin, en memoria de Yegor Sviridov, de 28 años, quien recibió un disparo y murió durante una pelea que tuvo lugar el domingo por la noche en el noroeste de Moscú.
Varios sospechosos, cuya procedencia sería del Cáucaso, fueron detenidos con motivo del asesinato.
Los manifestantes entonaron el sábado cánticos nacionalistas como "Moscú es una ciudad rusa", mientras se enfrentaban con tropas equipadas con armaduras y porras.
Las protestas políticas de pequeña escala son relativamente comunes en la capital rusa, pero una reunión de este tipo tan cerca de la casa de gobierno es poco frecuente. No hubo comentarios por parte de las autoridades policiales.
Más de 1.000 seguidores del Spartak de Moscú se reunieron más temprano el sábado en la parada de autobús en la que Sviridov fue asesinado.
Allí dejaron velas y bufandas con la frase "Spartak Ultras Moscú" -nombre del grupo principal de seguidores del club-, en un monumento conmemorativo que se montó en dicho lugar.
Algunos medios rusos informaron de que Sviridov era miembro de los Spartak Ultras, grupo vinculado con actos de violencia en el pasado.
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