lunes, 28 de febrero de 2011

La violencia en el partido Levski-CSKA deja 15 heridos y 23 arrestados








Al menos 23 hinchas arrestados, unos 15 policías heridos, coches destrozados y escaparates de tiendas y bares rotos es el resultado de los violentos enfrentamientos hoy en Sofía entre la Policía y aficionados violentos del CSKA, que jugó hoy con el Levski el tradicional derbi búlgaro.
El encuentro acabó con 1-3 para los visitantes del CSKA, cuyos hinchas radicales protagonizaron violentos incidentes incluso antes de comenzar el partido.
De hecho, los primeros arrestos ocurrieron horas antes del pitido inicial, cuando estallaron reyertas entre grupos de aficionados de ambos equipos, según informaron a Efe fuentes de la policía.
Esas fuentes relataron que durante el partido, las hinchas del CSKA se mostraron más agresivos en las gradas, al arrancar trozos de las tribunas para lanzarlos contra los agentes de seguridad, que también sufrieron el impactos de cohetes y objetos contundentes.
Ante esa actitud, la Policía decidió expulsar del estadio a los aficionados del equipo visitante, que continuaron con el vandalismo en las calles.
La cadena privada bTV mostró imágenes de automóviles con ventanas y espejos rotos y varias tiendas que sufrieron daños materiales. Fuentes policiales añadieron que los hinchas radicales han destrozado completamente el interior de un autobús de transporte público.
De los 15 agentes de policía heridos, diez de ellos recibieron atención médica en el estadio y otros cinco tuvieron que ser atendidos en hospitales por quemadura y traumatismos provocados durante los enfrentamientos con los hinchas.
El Levski y el CSKA, ocupan actualmente la segunda y la cuarta posición en la liga búlgara, con 32 y 29 puntos respectivamente. Una rivalidad histórica enfrenta a los dos equipos búlgaros.

El equipo salta con un mensaje en su camiseta: «No a la violencia»

El Cádiz no ha querido permanecer ajeno a los graves incidentes del pasado sábado, el día en el que cinco cadistas fueron heridos poco antes del partido con el Betis B por la agresión de varios hinchas radicales del conjunto verdiblanco.
El equipo amarillo saltó al terreno de juego con una camiseta en la que rezaba un mensaje: «No a la violencia». También, Brigadas Amarillas se acordó durante el encuentro de ayer de su amigo agredido, que todavía espera la intervención en su ojo dañado.
M. A. F. fue dado de alta el pasado viernes y volverá al hospital hoy mismo para la operación. Tras la evolución, los médicos son mucho más optimistas. El miércoles pensaban que podría tener el nervio óptico dañado, pero ahora las previsiones son bastante más satisfactorias. Sólo le quedaría un coágulo de sangre que sería extirpado y no perdería entonces la visión del ojo, lo que en un principio se temía.
No obstante, todavía se recupera de las fracturas del hueso molar, el maxilar y la nariz, consecuencias de la brutal paliza que recibió. Aún no se han producido detenciones, pero los agentes de Policía siguen con la investigación.