miércoles, 21 de diciembre de 2011

Un ‘tsunami’ blanquiazul en Madrid

Desde las ocho de la mañana comenzaron a partir de Ponferrada los autobuses que trasladaban a los seguidores deportivistas al Bernabéu. Las carreteras de Castilla eran un reguero de autobuses que desfilaban hacia Madrid. Y desde poco después de mediodía el Paseo de la Castellana y los alrededores del Bernabéu comenzaban a teñirse de blanquiazul y eran cientos y cientos las instantáneas que inmortalizaban una visita histórica a Madrid. Era raro andar por Madrid y no ver bufandas del cuadro berciano, incluso en hoteles y museos.
Con la apertura del estadio el Bernabéu mostró su lado más berciano. Aunque la mayoría de los aproximadamente 5.000 aficionados de la Ponferradina que estaban presentes se situaron en el fondo norte, las banderas de El Bierzo y de la Deportiva se situaron en todas las estancias del coliseo madridista. La afición vibró con su equipo, a pesar de la goleada en contra. Pero lo mejor estaba por llegar. Ver al equipo saltar a calentar, aparecer en el campo para el partido, jugar en el césped de Chamartín y sobre todo marcar en la segunda parte, cuando el Madrid ya ganaba 3-0. Acorán sorprendióa propios y extraños con un extraordinario partido. Se volverá a hablar del chicharrero en el próximo mes. Y hasta se cantó de nuevo el «A Ponferrada me voy», auqnue en esta ocasión la megafonía y la afición local no dejaron oirlo en todo su esplendor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario