La afición del Submarino escenificará su basta ya a los errores arbitrales este domingo. Lo hará, además, de una forma pacífica y singular, a través del reparto de 5.000 gafas gigantes por parte de la Agrupación de Penyes del Villarreal (APV), patrocinadas por la firma Canós Impressors. La medida quedará reforzada con la pancarta alusiva, que será colocada en la zona de preferencia.
Los varios penaltis cometidos sobre Uche que no le han señalado, la increíble segunda amarilla de Bruno en Huesca, las expulsiones sufridas por el entrenador... son los detonantes de esta propuesta, que añadirá todavía más presión al cántabro Arias López, el árbitro encargado de impartir justicia pasado mañana (17.00 horas), en El Madrigal, antes de que el siempre peligroso y polémico Pino Zamorano pite, una jornada después, el Murcia-Villarreal.
PACIENCIA DESBORDADA // Xavier Ibáñez, vicepresidente de la APV, asegura que ya están “hartos de los errores arbitrales que el equipo ha venido sufriendo de manera continuada y sistemática en las últimas jornadas”. Errores que, además, tampoco han sido subsanados por los distintos comités, a pesar de las reiteradas alegaciones y recursos presentados por la entidad amarilla.
Por ese motivo, y ante lo grave de las equivocaciones y del poco caso que se le hace al conjunto amarillo, las peñas han decidido protestar en esta jornada, aprovechando que el encuentro contra los sorianos será en El Madrigal.
La protesta, por tanto, consistirá en ponerse unas gafas gigantes, que se repartirán entre los aficionados que acudan pasado mañana al encuentro, bajó un lema: Igual los que no vemos somos nosotros. Un mensaje que resalta, de forma irónica, que esa pueda ser la causa de que lo que parece tan claro a vista de los aficionados, no lo es a vista de los árbitros, a tenor de lo que está sucediendo en las jornadas más recientes.
La APV solo quiere denunciar el perjuicio arbitral sobre el Submarino y el mismo trato que al resto. Simplemente, pues, justicia.
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