Un pequeño grupo de aficionados increpó a la plantilla del Real Madrid antes de tomar el avión de regreso desde Alemania. Algunos seguidores, desencantados tras la goleada (4-1) ante el Borussia Dortmund en la ida de semifinales de Champions League, trasladaron su enfado a los jugadores. Les achacaron, con otras palabras, falta de actitud y testosterona. Uno de los jugadores, Gonzalo Higuaín, entendió que las críticas no eran justas y replicó a los aficionados. El diálogo no pasó a mayores y los futbolistas fueron subiendo al avión sin ningún problema.
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