El Galatasaray no ha comenzado bien esta temporada . Todavía no conoce la victoria en la Liga turca. Tres partidos, tres empates ante el Brusapor (1-1), frente al Eskisehirspor (0-0) y contra el Antalyaspor (1-1) este viernes. Un inicio pobre teniendo en cuenta que ha ganado la Superliga turca en las dos últimas temporadas. No obstante, sus aficionados siguen siendo igual de leales y pasionales que años anteriores. Desde hace dos semanas las entradas se encuentran agotadas para recibir mañana al Real Madrid en el Ali Sami Yen Spor Kompleksi.
Los UltrAlsan (los ultras turcos, que significa leones) se preparan especialmente para los partidos de Champions. Han creado un tifo tridimensional especial para este encuentro después de un arduo trabajo durante 12 días. Será un infierno para el Madrid, aunque no para la afición visitante. El líder del UltrAslan, Veysel Giley, contó a AS que van a recibir a los hinchas blancos amistosamente porque su objetivo es tener buenas relaciones con todas las aficiones de la Champions League. Además, no se prevé ningún recibimiento multitudinario al Real Madrid en el aeropuerto. Los ultras no se han citado, como en otras ocasiones, para meter presión al equipo visitante.
Fatih Terim es el encargado de ilusionar a los más de 55.000 fieles que abarrotarán el estadio mañana. Es el héroe de la afición porque conquistó cuatro títulos de Liga seguidos de 1996 a 2000 y la copa de la UEFA (2000). El presidente, Unal Aysak, ha sido reelegido y mantiene la promesa de colocar al equipo entre los diez grandes de Europa. Este verano no ha vendido a su delantero estrella, Burak Yilmaz, que en las dos últimas temporadas ha marcado 56 goles en la Liga turca.
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