Lazio - Livorno, un partido especial

Lazio vs Livorno es presentado como uno de los partidos más especiales del fútbol europeo. No hay argumentos futbolísticos que respalden tanta consideración, pero sí una historia política que subyace en este enfrentamiento. Una historia que define en gran parte la historia de Italia y el resto del mundo del Siglo XX.

Este domingo volvieron a enfrentarse. Por la fecha 16 de la Serie A, el equipo romano se impuso 2 a 0 con goles del alemán Miroslav Klose. El triunfo le sirve para escapar de los puestos del fondo e ilusionarse con alcanzar la zona de clasificación a la Europa League.

Fascistas y obreros. La extrema derecha y las utopías comunistas. El poder y la resistencia. Lazio y Livorno se identifican con estas ideas respectivamente. Entonces, cada vez que juegan entre sí la prensa de su país recuerda estas diferencias biográficas para salpimentar el enfrentamiento deportivo.

Benito Mussolini llegó al poder en 1922. El fútbol no escapó a la supervisión dictatorial del régimen fascista. Il Duce organizó el Mundial de 1936 y, como ocurrió con Franco en España, apadrinó un club de fútbol: Lazio.

Lazio es sinónimo de la extrema derecha. Históricamente, su hinchada se caracterizó por promover las ideas del régimen. Un clásico con Roma, en la temporada 1988-1989, sirve como ejemplo. Esa tarde, los ultras laziales desplegaron una bandera dedicada a los futbolistas negros del equipo rival: “Auschwitz es su ciudad, los hornos sus hogares”.

Paolo Di Canio, exdelantero de Lazio y la Selección Italiana, llevó sus simpatías fascistas a las canchas de fútbol. Durante su etapa en el club de la capital les dedicó a los hinchas varios festejos con el tradicional saludo del régimen.

Livorno representa la cara opuesta. Ciudad y equipo fundados por obreros pescadores, sus hinchas levantaron las banderas del partido socialista. Cristiano Lucarelli, ídolo moderno del club, es famoso por sus ideas de izquierda y su admiración por el Che Guevara. Jugando un amistoso para la Selección Sub 21, tras convertir un gol, mostró una remera con la cara del revolucionario argentino ante las cámaras de televisión.