Semana importante para el Córdoba, que tras vencer la pasada semana a domicilio se le presentaba una ocasión de hora para engancharse de lleno en la lucha por el ascenso de categoría, un partido en su primera mitad donde el Córdoba llegaba mucho pero sin definición y peligro aparente, mientras Las Palmas tuvo el gol y poco más, la afición fue como el equipo de más a menos.
En la segunda mitad con el equipo perdiéndose en ocasiones del encuentro, la afición cada vez más quemada por la situación fuera de lo deportivo del club, acabó con gritos contra la directiva y el presidente, lo que fue la tónica en la fase final del choque.
Algo de colorido dieron el medio centenar de aficionados insulares que se situaban en Preferencia Alta, donde vibraron con el choque y la victoria de la Unión Deportiva, los amarillos muy activos y participativos en cánticos hicieron especial la tarde-noche en la ciudad califal, el buen rollo y el protagonismo adjunto de ambas aficiones hicieron que la fiesta del fútbol estuviera presente entre hinchadas.
Las arrancadas de Nieto y las espectaculares paradas de Mikel Saizar eran los pocos detalles que levantaba al público presente en la fría tarde a orillas del Guadalquivir, con un juego del equipo intermitente que en ocasiones levantaba ligeros silvidos y que no acaba de agradar al núcleo mayor de aficionados cordobesistas.
Lo más sonado y emocionante al unísono en el coliseum ribereño fue el himno a capella, donde los dos grandes grupos de animación del club como son "Incondicionales CCF" y "Brigadas blanquiverdes" , también la afición en varias ocasiones animó al lesionado Carlos Caballero, que tendrá que perderse al menos 6 meses de competición por su lesión del ligamento cruzado.
El ambiente algo más flojo que en las últimas jornadas, donde la afición estuvo más presente en las gradas del Nuevo Arcángel, los seguidores con la política de precios del club y la situación deportiva del equipo de Ferrer debe ser un pilar básico en luchar por las opciones que aún quedan en una segunda divisón tan apretada como esta campaña.
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