El partido de Vallecas desata la locura azulilla

La sede del Linares Deportivo vivió una tarde de locos. En apenas cuatro horas, el club completó doce autobuses de aficionados para el encuentro de ida de la segunda eliminatoria por el ascenso a Segunda División B, que se celebrará el domingo, a las doce del mediodía, en el Estadio de Vallecas. No fue un día fácil para la junta directiva.

El Rayo Vallecano se negó, en un principio, a abrir las puertas del campo en el que juega el primer equipo para la celebración del partido. 

El club presidido por Raúl Martín Presa exigía al Linares un número mínimo de 600 entradas para cambiar la Ciudad Deportiva, en el que habitualmente disputa sus duelos el filial, por el Estadio de Vallecas. Además, estableció una entrada de 20 euros para todos los aficionados no abonados del Rayo. Solo bajaba el precio de la localidad, a 10 euros, si el choque tenía como escenario la Ciudad Deportiva y con un límite de cien aficionados azulillos. Condiciones que el Linares no aceptó desde el primer momento. Después de varias horas de negociación, el director deportivo de la entidad azulilla, Alberto Lasarte, consiguió llegar a un acuerdo con su homólogo rayista. El pacto pasaba por disputar el partido en el Estadio de Vallecas y el coste de la entrada sería de 13 euros.

Nada más cerrarse las conversaciones, la directiva linarense se puso en contacto con la Diputación para conocer la ayuda que recibiría para el desplazamiento a Madrid. La Administración Provincial, al igual que el viaje a Terrassa, subvencionará parte de los autobuses. Así, el precio de la plaza de autocar más la entrada tiene un precio de 18 euros hasta el décimo vehículo, a partir del siguiente sube siete euros. 

Esto hizo que las primeras colas a las puertas de la sede del Linares se formaran a primeras horas de la tarde. Ayer, miércoles, no solo estaban completos doce autocares, sino que el club había abierto el decimotercero. 

A todo esto hay que sumar, los vehículos particulares que partirán hacia la capital de España en la madrugada del sábado al domingo y los cientos de linarenses residentes en la Comunidad de Madrid. “Estamos desbordados. Ha sido un día de locos, pero esta gente demuestra cada día la pasión por sus colores”, asegura el tesorero del Linares, Antonio Zapata. La “marea azulilla” tomará las calles de Vallecas, como ya lo hizo con anterioridad en Terrassa, Zamora o Ferrol.