El América de Cali se dispone a comenzar su cuarto año en la Segunda División del fútbol colombiano después de que el ultimo intento de ascender haya terminado en un auténtico fiasco y que el invento de la Dimayor de jugar dos cuadrangulares entre los históricos del campeonato para cubrir dos puestos en la división de honor, no haya servido para recuperar la categoría perdida.
Los jugadores americanistas iban a volver al trabajo para preparar el último e intrascendental partido del cuadrangular, si bien, y siguiendo órdenes de los directivos, no han podido hacerlo debido a las amenazas recibidas por parte de los aficionados radicales ante el fracaso sufrido por el pésimo papel del equipo en el cuadrangular: "La orden es no presentarse a los entrenamientos hasta nueva orden por un tema de seguridad", han manifestado los jugadores. Por otro lado también se ha conocido que las dos sedes del América permanecen bajo vigilancia de la Policía.
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