Un aficionado del Espanyol fue agredido este miércoles a la salida del hotel Parque. A la salida del mismo y en la esquina entre las calles Rodríguez Arias con María Díaz de Haro, a unos 300 metros de San Mamés. Según fuentes policiales, tres radicales del Athletic identificaron a un seguidor delEspanyol y le agredieron. Según se supo después, el aficionado fue atendido con rasguños y declinó presentar ninguna denuncia.
Pero los incidentes continuaron. Aficionados radicales del Espanyol rompieron varios escaparates en la zona de Deusto y radicales del Athletic salieron a su encuentro. Tres patrullas de laErtzaintza tuvieron que intervenir sin que hasta el momento haya habido detenidos.
La Ertzaintza retuvo a cuatro autobuses a 15 kilómetros de Bilbao
Los 300 aficionados del Espanyol que viajaron a Bilbao en autocar no gozaron de un placentero trayecto. A 15 kilómetros de llegar a la capital, la Ertzaintza los estaba esperando para retener a los cuatro autocares de los grupos de animación y cachear a los 220 aficionados que iban en su interior. Tras estar retenidos más de dos horas, los han trasladado a la zona de Duesto de Bilbao, donde se ubican los aficionados pericos con tal de que no se mezclen con los del Athletic hasta antes de que empiece el encuentro. El partido ha sido declarado de alto riesgo.
La Ertzaintza ha activado este protocolo, según sus propias palabras, “por órdenes de arriba”, al intuir que en los autocares de los grupos de animación podían ir aficionados que anteriormente pertenecían a las Brigadas Blanquiazules, siempre según su versión y como medida de precaución.
De Cornellà-El Prat partieron cinco autocares en horarios diferentes. A las 7:30 lo hicieron tres con miembros de la Curva, a las 9:00 les acompañó el autocar que organizaba el club perico con socios, la mayoría de ellos jóvenes, y a las 10:00, en último lugar, partió el autocar de la Juvenil. El trayecto fue largo pero animoso e ilusionante hasta el último peaje antes de llegar a Bilbao.
Los primeros autocares en retener fueron los tres de la Curva. La Ertzaintza los hizo bajar de tres en tres del autocar y los cacheó uno por uno. El despliegue tardó alrededor de dos horas. El siguiente autocar en aparecer fue el organizado por el club. En este iban 72 personas, de varias peñas y gente de todas las edades aunque en su mayoría jóvenes, a quienes únicamente los han retenido alrededor de media hora en un área de servicio y después los han trasladado a Deusto. No han tenido ningún problema para circular por la zona próxima a San Mamés. El tercer autocar en aparecer ha sido el de la Juvenil, que ha seguido el mismo procedimiento que el de la Curva.
La afición perica, después de 9 y hasta 10 horas de viaje (incluyendo las retenciones), regresará a Barcelona después del partido.
Pero los incidentes continuaron. Aficionados radicales del Espanyol rompieron varios escaparates en la zona de Deusto y radicales del Athletic salieron a su encuentro. Tres patrullas de laErtzaintza tuvieron que intervenir sin que hasta el momento haya habido detenidos.
La Ertzaintza retuvo a cuatro autobuses a 15 kilómetros de Bilbao
Los 300 aficionados del Espanyol que viajaron a Bilbao en autocar no gozaron de un placentero trayecto. A 15 kilómetros de llegar a la capital, la Ertzaintza los estaba esperando para retener a los cuatro autocares de los grupos de animación y cachear a los 220 aficionados que iban en su interior. Tras estar retenidos más de dos horas, los han trasladado a la zona de Duesto de Bilbao, donde se ubican los aficionados pericos con tal de que no se mezclen con los del Athletic hasta antes de que empiece el encuentro. El partido ha sido declarado de alto riesgo.
La Ertzaintza ha activado este protocolo, según sus propias palabras, “por órdenes de arriba”, al intuir que en los autocares de los grupos de animación podían ir aficionados que anteriormente pertenecían a las Brigadas Blanquiazules, siempre según su versión y como medida de precaución.
De Cornellà-El Prat partieron cinco autocares en horarios diferentes. A las 7:30 lo hicieron tres con miembros de la Curva, a las 9:00 les acompañó el autocar que organizaba el club perico con socios, la mayoría de ellos jóvenes, y a las 10:00, en último lugar, partió el autocar de la Juvenil. El trayecto fue largo pero animoso e ilusionante hasta el último peaje antes de llegar a Bilbao.
Los primeros autocares en retener fueron los tres de la Curva. La Ertzaintza los hizo bajar de tres en tres del autocar y los cacheó uno por uno. El despliegue tardó alrededor de dos horas. El siguiente autocar en aparecer fue el organizado por el club. En este iban 72 personas, de varias peñas y gente de todas las edades aunque en su mayoría jóvenes, a quienes únicamente los han retenido alrededor de media hora en un área de servicio y después los han trasladado a Deusto. No han tenido ningún problema para circular por la zona próxima a San Mamés. El tercer autocar en aparecer ha sido el de la Juvenil, que ha seguido el mismo procedimiento que el de la Curva.
La afición perica, después de 9 y hasta 10 horas de viaje (incluyendo las retenciones), regresará a Barcelona después del partido.
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