Un año de cárcel por una agresión en un partido de aficionados

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante ha confirmado la sentencia de un año de prisión a Daniel H. C. por un delito de lesiones tras una disputa en un partido de fútbol 7 celebrado en Benidorm en octubre de 2010. El fallo, al que ya no cabe recurso, considera probado que el condenado contestó a un golpe por la espalda a Álvaro V. F. en concreto un puñetazo en la boca, tras ser los dos expulsados. Como consecuencia de la acción, el jugador agredido sufrió heridas labiales, traumatismo facial y tratamiento odontológico con 70 días impeditivos, con un día de ingreso hospitalario. El Juzgado de lo Penal Número 1 de Benidorm condenó al acusado a un año de prisión y una multa de 3.768 euros por la acción y absolvió al jugador rival de cualquier pena, aunque con reparto de las costas procesales.

Daniel H. C. sufrió en la acción una herida en su mano derecha que le supuso una contractura con 60 días de curación, 45 de ellos impeditivos. Sin embargo, no pudo acreditar que dicha lesión se produjera por un pisotón posterior tras caer al suelo por una patada en la ingle, que según defendía el condenado llevó a cabo Álvaro V. F. como respuesta al puñetazo.

Fue este último, el jugador que fue objeto de la agresión, el que recurrió la sentencia argumentando incongruencia omisiva en materia de responsabilidad civil, error en la apreciación de oficio de las dilaciones, omisión de pronunciamiento sobre las cosas de la acusación particular, que ejercía él mismo como parte, y 'sobre el arbitrio judicial y la extensión de la pena impuesta'. El ministerio fiscal y el condenado impugnaron el recurso y solicitaron la confirmación de la sentencia del tribunal de Benidorm.

La magistrada de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante, María Dolores Ojeda, desestimó en su totalidad el recurso y confirmó de forma íntegra la sentencia que condenó a Daniel H. C. a un año de presión por un delito de lesiones a su rival, con el consecuente pago de la mitad de las costas judiciales por parte del jugador agredido en el partido de fútbol 7.