El periodista argentino especializado en violencia en el fútbol, Gustavo Grabia, dijo que en los hinchas probarras bravas y el fenómeno barras bravas “se mezclan en el fútbol argentino” y contó cuánto dinero maneja la Doce.
Grabia es periodista, especializado en violencia en el fútbol y en el fenómeno de barras bravas. Ha escrito el libro “La Doce, la verdadera historia de la barra brava de Boca”. A Grabia le envió el mensaje Adrián Napolitano, el hincha de Boca que lanzó el gas pimienta contra los jugadores de River. “No pensé que iba a llegar a lo que llegó, jamás me lo imaginé. Cuando me di cuenta, me quería morir”, dijo el barra en un correo de voz que dejó en el celular del periodista.
A propósito de la violencia en el fútbol argentino y de la barra de Boca, Grabia explicó al programa Y te digo más de Radio Nacional, que “hay una coyuntura particular que mezcla dos tipos de violencia. Una que se ha insertado entre los hinchas del fútbol, ahora los hinchas son proviolencia, probarras bravas. Y por otro lado está el fenómeno de barras bravas, conformadas por un grupo de delincuentes, la más grande es la 12. No son hinchas, son delincuentes que se disfrazan de hinchas”, dijo.
Grabia cubrió al poco tiempo de comenzar en el periodismo, el juicio a José Barrita, el Abuelo, mítico jefe de la Doce en los 90. “Cuando asisto a las audiencias, me di cuenta que no eran inadaptados, en realidad era un grupo totalmente adaptado al sistema del fútbol”
El periodista contó en Y te digo más que los dirigentes de fútbol, los políticos, los sindicalistas y los jugadores “sacan rédito” y no quieren terminar con la violencia. “Cuando el sistema está totalmente corrompido es muy difícil cambiarlo”, señaló.
“La Doce maneja una fortuna, hoy está sacando dos millones de pesos por mes, por esa plata acá en Argentina se mata”, dijo Grabia. Al dólar oficial ese monto significa unos 250 mil dólares.
Según el periodista de Olé y TyC Sports, los negocios de las barras están “vinculados al narcotráfico, a apretar a opositores políticos, a llevar gente a las manifestaciones, cobran protección a los negocios como una mafia”.
Grabia recordó un clásico en el que las barras de Boca y de River mostraron banderas con la leyenda “Clarín miente”: “Eso fue pagado por el gobierno, su idea era utilizar a las barras. Yo siempre dije que cuando se pacta con el diablo, el día de mañana te lleva al infierno. En Argentina, el espiral de violencia ha aumentado porque el gobierno lo ha alimentado. Recuerdo que armó una ONG de barras bravas. Metieron a los barras para que pelearan cuerpo a cuerpo con la oposición con el conflicto en el campo. Han hecho cosas que solo ha redundado en darle más impunidad y más poder”.
El periodista explicó que los jugadores son conscientes de los barras y “los quieren tener de su lado”. “Cuando Palermo concurría a las fiestas de la 12, sabía que eso le daba un plafón en la tribuna y que la tribuna iba a cantar por él aunque jugara mal. Los jugadores son conscientes de todo, son muy pocos los que pactan por temor, la mayoría pacta por una cuestión de conveniencia mutua”, dijo.
Según Grabia “mientras haya un botín alguien lo va a querer heredar”. Por tanto la solución sería “cortar el vínculo financiero, que es el verdadero poder que tiene el barra brava. Lamentablemente no veo ninguna voluntad de que se quiera cortar eso”.
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