Cuatro aficionados violentos del club de fútbol Boca Juniors fueron procesados hoy por la Justicia argentina debido a los disturbios que provocaron la suspensión del último superclásico ante River Plate.
La medida adoptada por la jueza de instrucción Wilma López alcanza a Adrián "Panadero" Napolitano, acusado de arrojar gas pimienta casero contra los jugadores de River Plate.
Napolitano, que en julio se declaró culpable ante la magistrada, está acusado del delito de lesiones leves agravadas, que según el Código Penal argentino establece una pena máxima de 16 meses de prisión.
El pasado 14 de mayo, Napolitano arrojó gas pimienta a los jugadores de River que se disponían a salir al campo de juego de "La Bombonera" a disputar el segundo tiempo del partido, correspondiente a la revancha de los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
Ante las lesiones sufridas por varios futbolistas, el árbitro decidió suspender el partido, que estaba igualado 0 a 0.
Por ello, un grupo de aficionados enfurecidos arrojaron a los jugadores de River botellas de agua, impidiéndoles dejar durante varios minutos el terreno de juego.
Posteriormente, la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) decidió dar por perdida la serie a Boca, aplicándole además una multa económica de 200.000 dólares y la suspensión de su estadio por cuatro partidos internacionales.
River, que había triunfado 1-0 en el encuentro de ida como local, avanzó de fase y posteriormente se consagraría campeón de la Copa Libertadores, al vencer en la final a Tigres de México (0-0 y 3-0).
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