En el duelo histórico de la Eredivisie que enfrentó ayer domingo al Ajax y al Feyenoord, se vivió una de las imágenes más lamentables en la historia del fútbol europeo. Aficionados del Ajax sacaron un muñeco con la camiseta de Kenneth Vermeer y lo dejaron colgando de las gradas como si se estuviera ahorcando.
Vermeer fue portero del Ajax durante seis temporadas, y pese a que es su segunda campaña en las filas de Feyernoord, la afición del Ajax sigue guardándole rencor al meta holandés.
Tras el pitido final, y la victoria del Ajax por 2-1, Vermeer declaró ante los micrófonos que: “Lo vi todo. No tengo palabras”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario