Inglaterra y Gales se miden el próximo 16 de junio en la ciudad de Lens en la segunda jornada del Grupo B de la Eurocopa y la localidad francesa ha tomado una medida drástica para evitar posibles disturbios entre los seguidores de las selecciones británicas, que serán mayoría en la ciudad del norte de Francia durante el torneo.
El alcohol estará prohibido en las calles de Lens desde las 6:00 am del día 16 hasta la misma hora del viernes. Es decir, durante 24 horas no se podrá comprar alcohol en la localidad y la policía francesa estará muy pendiente de posibles ‘importaciones’ desde otras ciudades en los coches de los aficionados, según informa ‘BBC‘.
Las autoridades han recomendado a los aficionados sin entrada que no acudan a la ciudad ese día, sino que vayan a Lille o alguna otra localidad con ‘fan zone’ para verlo. La policía espera que entre 350.000 y 500.000 aficionados viajen desde el Reino Unido durante el torneo. Además, esta restricción será también aplicada para el resto de encuentros que se disputen en Lens: Albania-Suiza, República Checa-Turquía y un partido de dieciseisavos de final. “Se espera que viajen a Francia más aficionados que en ningún otro torneo anterior y estamos trabajando con la policía francesa para evitar cualquier disturbio durante la competición”, dijo un miembro destacado del consejo británico de jefes de policía para la vigilancia del fútbol. “No hay excusa para la violencia, el desorden o el comportamiento antisocial en los partidos.
Los alborotadores serán tratados por la policía francesa en consonancia con sus leyes y pueden incluso recibir una orden de expulsión de regreso a Reino Unido”, añadió. La policía británica desplazada actuará como “intérpretes culturales” para evitar que los cuerpos de seguridad franceses apliquen la ‘mano dura’ contra los aficionados británicos ebrios y ruidosos que, en un principio, no causarán problemas de gravedad
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