La policía brasileña arrestó a 42 aficionados del club Corinthians que participaron en una trifulca en la reapertura del estadio Maracaná tras los Juegos Olímpicos y Paralímpicos.
El choque entre agentes de la policía de Río de Janeiro y fanáticos del Corinthians se registró poco antes que los visitantes empataran 2-2 con el equipo local Flamengo en un partido correspondiente a la fecha 32 del fútbol brasileño. La policía indicó que nadie resultó lesionado de gravedad. Los incidentes iniciaron cuando seguidores del Flamengo y el Corinthians empezaron a arrojarse objetos unos a los otros.
Fue el primer partido en el estadio desde que los Juegos Paralímpicos, que se llevaron a cabo después de los Juegos Olímpicos, llegaron a su fin en septiembre. La policía inicialmente retuvo a cerca de 3.000 aficionados del Corinthians antes de identificar a 42 que fueron arrestados. El Corinthians, que juega en Sao Paulo, emitió un comunicado en el que critica a las autoridades por mantener a sus aficionados en el estadio por horas.
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