La jornada de UEFA Europa League quedó empañada cuando los ultras del Olympique de Lyon y Besiktas protagonizaron un duelo en las tribunas, lo que obligó a retrasar el inicio del partido, y que ambos equipos salieran al campo de juego con un mensaje de paz para evitar mayores conflictos en una semana que ya tuvo el ataque al micro del Borussia Dortmund como principal exponente del grado de violencia que se está viviendo en Europa, ahora trasladado también a los estadio de fútbol, incluso en competencias de primer nivel.
Ahora, desde la dirigencia del club turco rechazaron tomar responsabilidad sobre lo acontecido, y señalaron que todo lo que ocurrió fue únicamente por culpa del Lyon. "Lo ocurrido fue responsabilidad del Lyon", señaló Metin Albayrak, portavoz de la dirigencia del Besiktas, en una entrevista con la agencia de noticias Anadolu.
Según él, sólo el Olympique de Lyon debería ser sancionado por la UEFA: "Nosotros no hicimos nada, no hay razón para preocuparnos. La prioridad para el club local debe ser asegurar que el encuentro tenga lugar en condiciones seguras".
Quince minutos antes de que comenzara el partido, fanáticos del Lyon invadieron el campo de juego luego de recibir diversos proyectiles por parte de los simpatizantes turcos.
"Las familias turcas fueron atacadas por hooligans franceses, con barras de hierro, sin hacer distinción entre niños y adultos", señaló Albayrak.
A la espera de una decisión oficial por parte de la UEFA, para saber si habrá o no sanción económica hacia los clubes, Olympique de Lyon y Besiktas volverán a enfrentarse el próximo jueves 20 de abril por el partido de vuelta, en una serie que va ganando el conjunto galo por 2-1.
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