sábado, 15 de abril de 2017

La Tragedia de Hillsborough

Hay un refrán muy popular que dice “ahogado el niño, a tapar el pozo”. Es una lástima que los cambios necesiten de un punto trágico, algo que hace que se realice un cambio radical por la mala y no por buena voluntad. El futbol no está exento de esta situación y el mejor ejemplo de ello fue la llamada Tragedia de Hillsborough.
El episodio ocurrió un sábado 15 de abril de 1989, en el estadio de Hillsborough de la ciudad de Sheffield, en el centro de Inglaterra; el escenario era testigo del duelo entre el Liverpool y el Nottingham Forest por la semifinal de la FA Cup. Tal era la expectación que causó el partido provocó que el estadio tuviera un sobrecupo de aficionados, algo que serpia determinante para los acontecimientos de aquel día.
La policía fue incapaz de controlar la afluencia de los aficionados, que ingresaban sin cesar al estadio; el sector que estaba asignado para los aficionados que estaban de pie se llenó con un sobrecupo brutal, y la gente se amontó en la parte cercana a la alambradas; pese a que todo indicaba que podría haber un desenlace fatal, la policía ignoró esta parte y dejó que el partido continuará, sin saber la tragedia que se avecinaba.
Apenas al minuto 6, la policía suspendió el encuentro, debido a que finalmente la policía se dio cuenta de lo que estaba pasando; cientos de aficionados se encontraban aprisionados en la alambrada, sin poder moverse; no obstante que se estaba desarrollando una tragedia, la policía actuó con demasiada lentitud, situación que derivo en la tragedia: “las muertes se produjeron por la aglomeración  en la zona central de la gradas. Me equivoqué al no darme cuenta de la necesidad de cerrar aquel acceso. Ese error fue la causa directa de la muertes”, declaró años después David Duckerfield, jefe de policía en aquel partido.
96 muertos y más 800 heridos fue el resultado de aquel día; la tragedia cimbró a todo el mundo futbolístico y sobre a la afición del Liverpool, que apenas 4 años antes había sido protagonista de otro episodio trágico en el futbol, la Tragedia de Heysel; aunque a diferencia de aquella, esta vez la investigación dio como respuesta que los aficionados no habían sido los principales responsables de la situación, sin embargo, el gobierno británico decidió que era tiempo de actuar para cambiar el sistema del fútbol en ese momento.
El resultado de ello fue la publicación del llamado Reporte Taylor, el cual detalló una serie de medidas con dos objetivos principales: el primero de ellos era el de erradicar de una vez por todas el fenómeno de los hooligans. El segundo objetivo era el de volver a evitar una tragedia de este tipo y por ello se propuso eliminar las zonas de pie en los estadios y que la comodidad en los estadios debía de ser prioridad.
El evento tuvo repercusiones más allá de los futbolístico; la más significativa de todas fue la que atañe al ex capitán del Liverpool, Steven Gerrard, quien años después confesó que un primo suyo de apenas 10 años pereció en la tragedia, lo que provocó una honda impresión en el capitán y que a partir de ese momento se convirtió en su mayor inspiración, convirtiendo desde entonces la Tragedia de Hillsborough en un símbolo para los aficionados del Liverpool.
Pasaban los años y quedaba por resolver un problema: el de castigar a los culpables. Finalmente, luego de una serie de varias investigaciones, en el año 2012, una comisión independiente señaló a la policía como la principal responsable de la tragedia, situación que motivó a que el primero ministro británico David Cameron pidiera una disculpa oficial por parte de los involucrados en la Cámara de los Comunes; si bien no era lo que esperaban, los familiares de las victimas indicaron que por lo menos se asumió la responsabilidad por los hechos, dejando un precedente para un acontecimiento que sin duda, marcó un antes y un después en el futbol.

No hay comentarios:

Publicar un comentario