lunes, 14 de mayo de 2018

Aficionados del Espanyol califican a sus directivos de "culés"

La brecha social que existe en el RCD Espanyol es brutal. Con Chen Yansheng en el estadio, los aficionados que han acudido hoy al RCDE Stadium para presenciar el último partido de liga en el feudo españolista se han encontrado con un montón de carteles en los aledaños del estadio con graves insultos para trabajadores y dirigentes del club.
El objetivo de estos insultos han sido Àlvar Mallafré, Roger Guasch y Adolf Rousaud, campaña que no hace más que demostrar el distanciamiento que se ha abierto entre la cúpula directiva del club y una parte de la masa social españolista.
Problemas en la grada
Una de las principales razones de este enfrentamiento se debe al contencioso que mantiene la Grada Canito con Mallafré, jefe de seguridad del club, por la imposición del acceso de sus miembros a firmar un documento por el que deben ceder sus datos personales para un fichero policial.
Como el horno no esta para bollos, los seguidores pericos han aprovechado la ocasión para atacar también a Guasch, director general corporativo del club, que ya ha avisado hoy en el maratoniano especial de 25 horas de Tiempo de Espanyol de que el año que viene subirán los precios de los abonos. La diana de los ataques ha incluido al vicepresidente Rousaud, siempre mirado con lupa en un club donde la fe españolista se antepone a todo.
Este incidente coincide, además, con el entorno españolista organizado para comunicarle a Mr. Chen de los riesgos que está corriendo el Espanyol y para ofrecerle una suerte de solución. Baja asistencia a Cornellà, ceses de cargos deportivos y desconexión de la entidad con su gente causan preocupación en un club donde nadie ve en sus dirigentes el gen perico en sus sangres. La propuesta: incluir en la directivas a españolistas de pro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario