Este miércoles el Comité de Competición ha acordado multar al Gimnàstic de Tarragona por la invasión de campo que se produjo el pasado sábado en el Nou Estadi al finalizar su partido contra el Rayo Vallecano. El conjunto catalán derrotó por 2-0 a un Rayo Vallecano ya ascendido a la Liga Santander y certificó la permanencia tras una temporada cuyo final se había alargado más de lo esperado.
El árbitro valenciano Saúl Ais Reig destacó en el acta que "al finalizar el encuentro, se produjo una invasión al terreno de juego de multitud de aficionados locales desde todas las partes, no produciéndose ninguna incidencia a reseñar".
A esa reseña del acta arbitral hay que añadir que este mismo miércoles, LaLiga había presentado una denuncia por esos mismos hechos. No obstante, la patronal destacó en su comunicación que "la invasión tenía un aspecto festivo para celebrar los aficionados la permanencia de su equipo en la categoría".
Por esa invasión, el Comité de Competición ha aplicado el artículo 110 del Código Disciplinario al entender que la invasión constituye una "alteración del orden del encuentro de carácter leve". El órgano disciplinario ha considerado que ha de tener el carácter de "leve" porque ni el acta arbitral ni LaLiga han destacado que se pusiera en peligro la integridad física ni de los árbitros ni de los jugadores o entrenadores.
Al respecto, el citado precepto establece que "cuando con ocasión de un partido se produzcan hechos de los definidos en el artículo 15 del presente ordenamiento y se califiquen por el órgano disciplinario como leves, el club responsable será sancionado con multa de hasta 602 euros".
El artículo 15 al que se hace mención reza que "cuando con ocasión de un partido se altere el orden, se menoscabe o ponga en peligro la integridad física de los árbitros, jugadores, técnicos o personas en general, se causen daños materiales o lesiones, se produzca invasión del terreno de juego [...] incurrirá en responsabilidad el club organizador del mismo, salvo que acredite el cumplimiento diligente de sus obligaciones y la adopción de las medidas de prevención exigidas por la legislación deportiva para evitar tales hechos o mitigar su gravedad". En este caso se sanciona al Nàstic porque el acta recalca que invadieron el campo "multitud de aficionados locales".
Por ello, el conjunto tarraconense deberá hacer frente a una multa económica irrisoria. Una multa fruto de las formas en las que se celebró la victoria en la última jornada de la temporada y, sobre todo, la permanencia en la categoría de plata del fútbol español.
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