Un grupo de seguidores radicales del Lleida aguardó fuera del campo a los alicantinos con intención de agredirles y el lanzamiento de una piedra alcanzó al mosso, que sufre la fractura del tabique nasal. Ninguno de los aficionados del Hércules ha sufrido daño alguno, si bien varias mujeres fueron zarandeadas, entre ellas la madre del jugador blanquiazul Nani, que estaba acompañada por otro familiar cercano.
Tras esta lamentable acción, varios aficionados del Hércules se dispusieron a devolver el ataque y fue entonces cuando entraron en acción los Mossos, que finalmente escoltaron al autobús hasta la entrada de la autopista debido al temor de que el grupo de exaltados locales les persiguieran y continuaran con el hostigamiento.
«Españoles de mierda»
Varios seguidores alicantinos desplazados a Lleida coincidían anoche en que fueron insultados por un grupo de jóvenes al grito de «españoles de mierda» y lamentaron «la tardía intervención» de la policía autonómica catalana.
Todos estos sucesos se produjeron sin que nadie del Hércules se diera cuenta debido a que los dirigentes estaban dentro del estadio despidiéndose de los jugadores, que empezaban a subir al autobús bajo una fuerte lluvia.
Desde el club lamentaron los incidentes, mostraron su apoyo a los 65 aficionados desplazados por carretera y les dedicaron la victoria. El ataque sorprendió a propio y a extraños ya que los seguidores alicantinos no pertenecían a ninguna peña que en anteriores ocasionse se haya visto envuelta en incidentes, de ahí que varios de los afectados regresaran anoche por carretera con un buen susto en el cuerpo.
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