La directiva del Sporting considera que la pelea entre los ultras gijoneses y los del Génova es «totalmente ajena al club». «No tenemos nada que decir al respecto, porque ni fue dentro del campo ni se trata de personas que tengan algo que ver con la entidad», explicaron desde el gabinete de prensa sobre la trifulca del parque del 'Kilometrín' del día 13 de agosto. Añaden que condenan «cualquier tipo de violencia», aunque no van a tomar medidas «porque eso corresponde a la Comisión Antiviolencia».
El Cuerpo Nacional de Policía ha practicado ya quince detenciones de seguidores radicales del equipo rojiblanco, la mayoría de los cuales habían estado involucrados en otros sonados ataques, como los de diciembre de 2009 con la hinchada del Sevilla. Se da la circunstancia de que el club rojiblanco tiene un local cedido en El Molinón a la peña 'Ultra Boys' para guardar el material que luego sus componentes sacan al campo.
Desde el club tampoco quisieron entrar a valorar las imágenes del vídeo publicado por EL COMERCIO en el que se recoge la brutal agresión entre las hinchadas. «No sabemos si los participantes son ni siquiera de alguna peña», dicen. Sin embargo, el Cuerpo Nacional de Policía señala en todos los comunicados emitidos sobre el suceso que se trata de miembros del grupo 'Ultra Boys' de Gijón.
En declaraciones efectuadas días atrás, la cúpula de la peña radical tampoco condenó el ataque. «Peleas como esas las hay todos los días en España y si sales por la noche lo ves cada dos por tres», opinó uno de los cabecillas.
Afición indignada
La que sí ha mostrado su indignación por lo ocurrido es la inmensa mayoría de la afición rojiblanca. No sólo contra los ultras, sino también contra la directiva, a la que acusan de no tomar medidas para erradicar este tipo de prácticas, que cada vez son más frecuentes. «No hemos visto jamás a Vega-Arango criticando a los 'Ultra Boys', ¿tiene que morir alguien para que esto se tome en serio?», se escuchaba en la grada de El Molinón en el partido del sábado contra la Real Sociedad.
La Brigada de Información de la Comisaría de Gijón continúa con las investigación y no se descarta que se produzcan nuevas detenciones. Hasta ahora están implicados quince ultras del Sporting y doce del Génova. Se les acusa de un delito de riña multitudinaria. Catorce de ellos fueron apresados el mismo día de la pelea, que se saldó con diez personas atendidas en centros sanitarios y otras más heridas que evitaron los hospitales para que no les relacionasen con la pelea.
El resto de imputados, todos ellos miembros de la peña radical del Sporting, fueron identificados y arrestados la semana pasada gracias a las imágenes grabadas con un teléfono móvil por un agentes de la Policía que se encontraba fuera de servicio. El hecho de que la Policía tuviese 'fichados' a la mayoría los hinchas del Sporting, bien por tener antecedentes o bien por los seguimientos en partidos y reuniones, ayudó a estrechar las pesquisas en torno a los participantes en el enfrentamiento con los «tifosi». A ello se sumaron las lesiones corporales que presentaban en los días posteriores. Las imágenes, difundidas el sábado por este periódico en exclusiva, muestran una violencia inusitada entre medio centenar de personas armadas con palos, bates, hebillas y botellas rotas. El desencuentro tuvo su origen en las diferencias ideológicas que separan a los Ultra Boys y al grupo Herri Norte, radicales de ultraizquierda del Athletic de Bilbao, a su vez hermanados con el Génova.
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