Una fiesta de cumpleaños donde asistían en su mayoría jóvenes integrantes de la barra brava "Barón Rojo" del América, terminó con dos heridos, entre ellos un agente, y seis detenidos, después de un enfrentamiento a bala entre hinchas y policías en el barrio Santa Elena, en el suroriente de Cali.
Durante la fiesta hubo exceso de consumo de licor hasta la mañana de hoy, cuando se desencadenó la agresión contra un vecino que reclamaba control a los excesos de los jóvenes.
Cuando llegó la fuerza pública, ante el llamado de los vecinos, los barristas atacaron a uno de los uniformados, quien sufrió una herida en su cabeza con su propia arma de dotación que le quitaron los agresores.
La llegada de un refuerzo policial obligó a los hinchas a atrincherarse en una vivienda desde donde hubo disparos a los que respondió la policía con tiros al aire y llamados para que se entregaran.
Al final, hubo seis jóvenes detenidos que causaron daños en los tejados de algunas viviendas por donde trataban de huir de la acción policial.
Un arma de fuego, sin salvoconducto, fue incautada en el interior de la residencia que fue utilizada como fortín de los alicorados barristas.
Los vecinos del sector dicen que cada vez que realizan estas fiestas hay discusiones o enfrentamientos con la Policía y aseguran que deben resguardarse en sus casas por temor a ser agredidos.
Durante la fiesta hubo exceso de consumo de licor hasta la mañana de hoy, cuando se desencadenó la agresión contra un vecino que reclamaba control a los excesos de los jóvenes.
Cuando llegó la fuerza pública, ante el llamado de los vecinos, los barristas atacaron a uno de los uniformados, quien sufrió una herida en su cabeza con su propia arma de dotación que le quitaron los agresores.
La llegada de un refuerzo policial obligó a los hinchas a atrincherarse en una vivienda desde donde hubo disparos a los que respondió la policía con tiros al aire y llamados para que se entregaran.
Al final, hubo seis jóvenes detenidos que causaron daños en los tejados de algunas viviendas por donde trataban de huir de la acción policial.
Un arma de fuego, sin salvoconducto, fue incautada en el interior de la residencia que fue utilizada como fortín de los alicorados barristas.
Los vecinos del sector dicen que cada vez que realizan estas fiestas hay discusiones o enfrentamientos con la Policía y aseguran que deben resguardarse en sus casas por temor a ser agredidos.
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