Desde la réplica, "un primo", del cochinillo que le tiraron a Luis Figo en el Camp Nou en 2002 en su segunda temporada como jugador del Real Madrid, hasta armas incautadas por la policía en distintos campos de fútbol, pasando por la motocicleta que lanzaron al campo en el partido Inter-Atalanta en Italia y acabando con un ataúd del Borussia Dortmund para ir al cielo con los colores negro y amarillo del conjunto alemán, todo lo podrán ver en la exposición 'Pasión en las gradas' que mañana abre sus puertas en el Espai Cultural de Caja Madrid en Barcelona (Plaza Catalunya, 9)Esta muestra, que podrán visitar hasta el 20 de abril, presenta los aspectos positivos y negativos que suscita el fútbol entre sus aficionados. Desde la alegría y la euforia hasta la violencia y el racismo del deporte rey, el que arrastra más pasiones. El suizo Klaus Littmann, comisario de la exposición, explica que sólo pretenden ser "arqueólogos del fútbol y mostrar con los objetos lo que ocurre y lo que es el fútbol". Objetos oficiales de los clubs y otros recogidos de los ultras forman parte de esta exposición que empezó en Basilea, Suiza, en 2002, tuvo su continuación en Essen (Alemania) un año después y que evoluciona y se amplía ahora en Barcelona.
Entonces tuvieron la cabeza del cochinillo que aficionados culés lanzaron al Camp Nou el 23 de noviembre de 2002, cuando el 'traidor' Luis Figo regresó a Barcelona con el Real Madrid, en su segunda temporada como jugador blanco. En el Espai Cultural de Caja Madrid podrán ver, no la auténtica, pero sí una cabeza de cochinillo como esa. "Es el primo hermano", bromea Littmann, que asegura que no puede dar detalles de quién le dio el auténtico cochinillo "porque le metería en problemas". El comisario de la exposición explicó que tras la última exposición y tras conservarlo en formol, lo tiró. "Lo que me interesa, más que la autenticidad de la cabeza de cochinillo, es que con ese objeto no se tiene que explicar nada.El mensaje está claro".
A Littmann, que fue galerista antes, le han llegado objetos y fotos de todas partes. Ha tenido que hablar con los ultras para conseguir los objetos más raros y las pancartas más duras y racistas. El comisario suizo, que se declara seguidor del Barça, explicó que un día le llegó un aficionado y le dijo que si le interesaba un poste de una portería que él tenía en su salón como si de un trofeo se tratase. Klaus Littmann le dijo que sí y el seguidor se lo llevó.
La exposición consta de seis áreas: Violencia, Racismo, Discriminación, Palabras, Fascinación, Prevención y Masas. Lo mejor y lo peor del fútbol está representado ahí. Con 400 fotografías, objetos y vídeos pretenden mostrar la realidad de este deporte en la actualidad y en todo el mundo, con especial incidencia del fútbol español. No se la pierdan
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