El Comité de Competición y Disciplina Deportiva decidió suspender cautelarmente al club de fútbol Bada-Bing FC del campeonato de la Tercera Territorial tras los incidentes el sábado que se saldaron con varios heridos del Rosario Central de Catalunya, así como a cuatro jugadores de este club, según informó hoy la Federació Catalana de Futbol.
El sábado el partido entre ambos clubes fue suspendido por el árbitro tras la expulsión de un jugador del Bada-Bing, ya que los jugadores y aficionados de este club empezaron supuestamente a proferir insultos racistas, amenazas de muerte y golpes a los jugadores y aficionados del Rosario Central, que cuenta con miembros de siete nacionalidades distintas.
Así, el Bada-Bing no podrá jugar ninguno de los partidos programados en el grupo 17 de la Tercera Territorial. El Comité de Competición, que volverá a reunirse la próxima semana, decidió también incoar un expediente al partido, y ambos clubes tienen dos días para presentar alegaciones y las pruebas que consideren oportunas.
El Consejo Municipal de Inmigración de Barcelona, que aúna asociaciones de inmigrantes y sindicatos, reclamó en un comunicado la implicación de toda la sociedad para evitar agresiones "racistas" e hicieron un llamamiento para eliminar estas actitudes dentro del deporte.
CiU pide seguridad en las instalaciones
El presidente del grupo municipal de CiU en Barcelona, Xavier Trias, ha pedido al ayuntamiento de la capital catalana que garantice la seguridad en las instalaciones deportivas de su competencia.
El presidente de CiU en Barcelona, que ha condenado las agresiones racistas, ha calificado la agresión de "un atentado contra la finalidad cívica de la práctica deportiva" y ha añadido que "el equipo agredido tiene que ver defendido su derecho efectivo a la práctica deportiva pacífica y en condiciones".
El sábado el partido entre ambos clubes fue suspendido por el árbitro tras la expulsión de un jugador del Bada-Bing, ya que los jugadores y aficionados de este club empezaron supuestamente a proferir insultos racistas, amenazas de muerte y golpes a los jugadores y aficionados del Rosario Central, que cuenta con miembros de siete nacionalidades distintas.
Así, el Bada-Bing no podrá jugar ninguno de los partidos programados en el grupo 17 de la Tercera Territorial. El Comité de Competición, que volverá a reunirse la próxima semana, decidió también incoar un expediente al partido, y ambos clubes tienen dos días para presentar alegaciones y las pruebas que consideren oportunas.
El Consejo Municipal de Inmigración de Barcelona, que aúna asociaciones de inmigrantes y sindicatos, reclamó en un comunicado la implicación de toda la sociedad para evitar agresiones "racistas" e hicieron un llamamiento para eliminar estas actitudes dentro del deporte.
CiU pide seguridad en las instalaciones
El presidente del grupo municipal de CiU en Barcelona, Xavier Trias, ha pedido al ayuntamiento de la capital catalana que garantice la seguridad en las instalaciones deportivas de su competencia.
El presidente de CiU en Barcelona, que ha condenado las agresiones racistas, ha calificado la agresión de "un atentado contra la finalidad cívica de la práctica deportiva" y ha añadido que "el equipo agredido tiene que ver defendido su derecho efectivo a la práctica deportiva pacífica y en condiciones".
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