La Liga de Fútbol Profesional (LFP) prohibió "por motivos de seguridad" la presencia de aficionados marselleses en las gradas del Parque de los Príncipes de París, en el clásico del fútbol galo que enfrentará al equipo de la capital, el PSG, contra su histórico rival, el Marsella, el próximo domingo.
La medida también será efectiva para la segunda vuelta de la liga en el Estadio Velódromo de Marsella, que estará vetado al público parisino, según precisó la LFP en un comunicado.
"La prohibición del desplazamiento de los aficionados marselleses es más que nunca indispensable" y "cualquier otra decisión no permitiría, en el contexto actual y con los medios disponibles (...) garantizar la seguridad de este encuentro", aseguró la LFP.
Así, la Comisión de Competiciones decidió cerrar la tribuna de visitantes para ambos partidos entre parisinos y marselleses, postura que aplaudió el Ministerio del Interior, desde donde se recordó que los enfrentamientos entre ambos equipos la pasada temporada dieron lugar a "incidentes muy violentos".
Se refiere al partido del pasado 28 de febrero en el que se midieron ambos clubes y tras el que un aficionado de 37 años del PSG resultó muerto como consecuencia de la paliza que le propinaron radicales de otra facción de su propio club.
La prohibición llega después de que se hubiera producido un "debate sin fin" sobre la limitación del número de aficionados que podrían acudir al estadio rival y tras implementar una serie de medidas de seguridad como el "toque de queda" a las hinchadas visitantes y las detenciones sistemáticas de los elementos más violentos de estos grupos, agregó Interior.
Además, según Interior, eventos como la protesta contra la reforma de las pensiones programada la víspera por los sindicatos y la visita de Estado del presidente de China, Hu Jintao, hace "totalmente imposible movilizar" los efectivos que en años anteriores han velado por la seguridad de esos encuentros.
El presidente del Marsella señaló que unos 1.500 aficionados tenían previsto desplazarse para el encuentro de este domingo en París.
La medida también será efectiva para la segunda vuelta de la liga en el Estadio Velódromo de Marsella, que estará vetado al público parisino, según precisó la LFP en un comunicado.
"La prohibición del desplazamiento de los aficionados marselleses es más que nunca indispensable" y "cualquier otra decisión no permitiría, en el contexto actual y con los medios disponibles (...) garantizar la seguridad de este encuentro", aseguró la LFP.
Así, la Comisión de Competiciones decidió cerrar la tribuna de visitantes para ambos partidos entre parisinos y marselleses, postura que aplaudió el Ministerio del Interior, desde donde se recordó que los enfrentamientos entre ambos equipos la pasada temporada dieron lugar a "incidentes muy violentos".
Se refiere al partido del pasado 28 de febrero en el que se midieron ambos clubes y tras el que un aficionado de 37 años del PSG resultó muerto como consecuencia de la paliza que le propinaron radicales de otra facción de su propio club.
La prohibición llega después de que se hubiera producido un "debate sin fin" sobre la limitación del número de aficionados que podrían acudir al estadio rival y tras implementar una serie de medidas de seguridad como el "toque de queda" a las hinchadas visitantes y las detenciones sistemáticas de los elementos más violentos de estos grupos, agregó Interior.
Además, según Interior, eventos como la protesta contra la reforma de las pensiones programada la víspera por los sindicatos y la visita de Estado del presidente de China, Hu Jintao, hace "totalmente imposible movilizar" los efectivos que en años anteriores han velado por la seguridad de esos encuentros.
El presidente del Marsella señaló que unos 1.500 aficionados tenían previsto desplazarse para el encuentro de este domingo en París.
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