El ejemplar comportamiento de la afición del Dépor tuvo un lunar desagradable en Vilalba. El club «lamenta» los incidentes ocurridos con motivo del amistoso del domingo, que comenzaron antes del encuentro con la realización de pintadas en una plaza y siguieron durante el choque, cuando un grupo de aficionados saltaron de la grada al campo.
El Deportivo precisa que estos lamentables disturbios fueron causados «por un grupo muy pequeño y aislado que para nada representa a la afición». En este sentido, se recalca que la mayoría de los aficionados coruñeses que acudieron a la localidad tuvieron un «comportamiento ejemplar». Medios oficiales de club coruñés se hicieron eco ayer de lo ocurrido en Vilalba y calificaron los hechos como «lamentables»
En la previa del partido, un grupo de aficionados realizaron diversas pintadas en bancos y muros de la plaza de la Constitución de Vilalba. En una de ellas se insultaba a Manuel Fraga (natural de Vilalba) y en otras había mensajes independentistas. Gerardo Criado, alcalde de la localidad, apuntó ayer que la Policía Nacional y la Guardia Civil le comunicaron que los autores fueron «miembros de Riazor Blues». «En todo caso, no hay que culpar a todos, pues fue acción de tres o cuatro exaltados», matiza.
En el interior del recinto, el episodio más comentado ocurrió en la segunda mitad, cuando un grupo de aficionados bajaron de la grada y se situaron en el entorno del banquillo del equipo coruñés. Con el encuentro en disputa, los hinchas intentaron hablar con Oltra y los jugadores. Los seguidores se colocaron detrás de la valla que separa la pista del césped y varios guardias civiles se pusieron delante para controlar la situación. Respecto a este hecho, el presidente del Racing Vilalbés, José Antonio Pita, aseguró ayer que «no ocurrió absolutamente nada, pues los aficionados pueden estar en esa zona, siempre y cuando se pongan detrás de la valla». Añadió Pita que no se registró ningún tipo de destrozo en el estadio, aunque hubo más de 2.300 espectadores.
Antes del inicio del partido y también durante su disputa se encendieron bengalas. Al final del choque hubo la habitual invasión de campo de los partidos de pretemporada. Además, la rueda de prensa de Oltra, que tuvo lugar en la cercanía de los vestuarios por carecer A Magdalena de zona de prensa, fue interrumpida por dos hinchas, primero, y posteriormente por el lanzamiento de agua sobre los periodistas.
El Ayuntamiento empezó el domingo a limpiar las pintadas. Ayer había sido borrada la que aludía a Fraga, aunque aún se intuía. Por su parte, la plataforma cívica A Alameda, espazo da nosa memoria condenó «os efectos do vandalismo que se produciron na Alameda, considerándoo un atentado ao patrimonio». En cuanto a las pintadas, el Deportivo apunta que «no tiene medios para controlar lo que hagan los aficionados fuera del campo, y tampoco la competencia».
El Deportivo precisa que estos lamentables disturbios fueron causados «por un grupo muy pequeño y aislado que para nada representa a la afición». En este sentido, se recalca que la mayoría de los aficionados coruñeses que acudieron a la localidad tuvieron un «comportamiento ejemplar». Medios oficiales de club coruñés se hicieron eco ayer de lo ocurrido en Vilalba y calificaron los hechos como «lamentables»
En la previa del partido, un grupo de aficionados realizaron diversas pintadas en bancos y muros de la plaza de la Constitución de Vilalba. En una de ellas se insultaba a Manuel Fraga (natural de Vilalba) y en otras había mensajes independentistas. Gerardo Criado, alcalde de la localidad, apuntó ayer que la Policía Nacional y la Guardia Civil le comunicaron que los autores fueron «miembros de Riazor Blues». «En todo caso, no hay que culpar a todos, pues fue acción de tres o cuatro exaltados», matiza.
En el interior del recinto, el episodio más comentado ocurrió en la segunda mitad, cuando un grupo de aficionados bajaron de la grada y se situaron en el entorno del banquillo del equipo coruñés. Con el encuentro en disputa, los hinchas intentaron hablar con Oltra y los jugadores. Los seguidores se colocaron detrás de la valla que separa la pista del césped y varios guardias civiles se pusieron delante para controlar la situación. Respecto a este hecho, el presidente del Racing Vilalbés, José Antonio Pita, aseguró ayer que «no ocurrió absolutamente nada, pues los aficionados pueden estar en esa zona, siempre y cuando se pongan detrás de la valla». Añadió Pita que no se registró ningún tipo de destrozo en el estadio, aunque hubo más de 2.300 espectadores.
Antes del inicio del partido y también durante su disputa se encendieron bengalas. Al final del choque hubo la habitual invasión de campo de los partidos de pretemporada. Además, la rueda de prensa de Oltra, que tuvo lugar en la cercanía de los vestuarios por carecer A Magdalena de zona de prensa, fue interrumpida por dos hinchas, primero, y posteriormente por el lanzamiento de agua sobre los periodistas.
El Ayuntamiento empezó el domingo a limpiar las pintadas. Ayer había sido borrada la que aludía a Fraga, aunque aún se intuía. Por su parte, la plataforma cívica A Alameda, espazo da nosa memoria condenó «os efectos do vandalismo que se produciron na Alameda, considerándoo un atentado ao patrimonio». En cuanto a las pintadas, el Deportivo apunta que «no tiene medios para controlar lo que hagan los aficionados fuera del campo, y tampoco la competencia».
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